El hecho sucedió el pasado lunes en el Jardín 904, institución a donde concurre Sofía de 4 años. Cuando la mamá retira a su nena del Jardín y se da cuenta que le dolía su mano, le pregunta qué le pasó y la niña responde que se había caído de la hamaca y que se pegó con un fierro. “Desde el Jardín no me avisaron que mi nena se había golpeado y tampoco llamaron a ninguna emergencia médica y la única respuesta que me dan es que se les fue de las manos, que no se imaginaban que había sido tan grave”, relató. “la directora dice que está angustiada; ahora es tarde para los lamentos”, continuó.
“La llevo al Hospital, la atienden, le hicieron mover la mano, me dieron ibuprofeno y me dijeron “tranquila mamá que la nena no tiene nada”. Volvemos a casa y al otro día ya tenía la mano negra. Hablo con un médico de 25 de mayo que es el médico en el cual yo confió ciegamente porque atendió a mi otro hijo , la llevamos, le hicieron placa y mi nena tiene la mano fracturada y debe estar con un yeso por más de 50 días”.
Ahora yo me preguntó, ¿Por qué no me llamaron?; ¿Por qué no me avisaron cuando la fui a retirar que mi hija se había caído? ¿ Por qué no llamaron a emergencias?
“Me dirigí al Consejo escolar, hice la denuncia, pero solo me escuchaban, no me decían nada y no me hicieron firmar ningún papel. La directora del establecimiento junto a una persona más que es la encargada del seguro, vinieron a verme, pero no las atendí, no quiero hablar más con estas personas y mi hija no va a ir más a ese Jardín. No quiero nada, ni la plata de un seguro, nada”.
“Lo único que espero es que mi nena se ponga bien y que pueda mover la mano de nuevo porque la tiene fracturada en tres pares y pasaron dos días. Y el Hospital deja mucho que desear también, porque me mandaron de nuevo con mi nena con un ibuprofeno”.