Hace un año, la marcha que respondió a la consigna #NiUnaMenos marcó un hito: hizo visible la tragedia de miles de víctimas de la violencia sexista e incentivó un llamado a la conciencia de toda la sociedad para poner freno al drama de tantas mujeres que aún sufren este flagelo que las pone permanentemente en peligro sólo por su condición de género. Muchas ciudades de todo el país volvieron a marchar, esta vez con el agregado: Vivas nos queremos.
La marca de los últimos 12 meses se sitúa prácticamente en el mismo nivel que en 2014: entre el 1° de enero y el 31 de diciembre de ese año hubo 277 femicidios.
La fría estadística, que reduce a números tragedias reales con nombres y apellidos, revela que la mayoría de las víctimas tenían entre 19 y 50 años, y que en el 80% de los casos conocían a sus asesinos: esposos, parejas, novios, ex relaciones de todo tipo, padres y padrastros, vecinos e incluso hijos.
En nuestra ciudad, diferentes agrupaciones, autoridades municipales, partidos políticos, se reunieron en “El Paseo de los Inmigrantes” en donde se colocaron carteles, para luego marchar hacia la Plaza Principal. Allí, hubo micrófono abierto para que se expresaran los presentes. También, se realizó un nuevo perdido de justicia por Marisol Oyhanart cuyo crimen, luego de dos años está sin resolver.
Hicieron uso de la palabra las concejales Maria Marta Delucía y Maria Mancini, representantes de SUTEBA, alumnos del Colegio Nacional, alumnos del ISFD N° 16, Jóvenes Radicales y Representantes del Grupo ENVIÓN, entre otros.