Esta mañana, en el hall del Palacio Municipal, se realizó una importante presentación para el futuro de Saladillo. Se trata del nuevo Código de Ordenamiento Urbano, que llega para darle un criterio al crecimiento de la ciudad, tanto en la densificación del centro como en cuestiones patrimoniales y ambientales. En específico, incluye nada menos que las medidas que pueden llegar a tener los terrenos en cada lugar de Saladillo y qué actividades se podrían desarrollar allí.
Además, se presentó el Nomenclador de Calles: un catálogo oficial con los nombres de las vías de circulación con distintas categorías de información tanto de Saladillo como de las cinco localidades del interior.
Guillermo Candia, Secretario de Obras Públicas, recalcó: «Son trabajos que llevan mucho tiempo y son poco tangibles, cosas que no alcanzamos a identificar o ver de manera física como cuando vemos una obra de electricidad, de saneamiento«, y explicó: «Este Código es un conjunto de normas legales que van a regular la urbanización y el crecimiento de nuestra ciudad».
Seguidamente, Matías Salomón, Subsecretario de Obras Públicas y Planeamiento, admitió que «esto surge de una ordenanza del Concejo Deliberante a través de una iniciativa de la concejal María Mancini» y, también, explicó llanamente: «Lo que se hace es recopilar en un catálogo amigable, para ofrecer a la gente, toda la información que teníamos a través de los planos. Lo valioso es que es oficial y va a estar disponible en la web para ser descargado por cualquier persona que lo desee».
Lisandro González, Director de Planeamiento, Tierra y Vivienda, expresó: «No quiero dejar pasar por alto que si bien se trabajó mucho en estos últimos 4 años con la creación de la Dirección de Planeamiento, Walter Kudrik, Mariana Orlando y Yamila Artigas hicieron un trabajo de campo espectacular. Sin ellos en ese tiempo, hubiera sido imposible convalidar un trabajo tan grande en la provincia».
José Luis Salomón, por último, agregó: «Es una herramienta fundamental para el futuro, tiene un valor enorme. No quita ningún derecho, al contrario: genera más oportunidades, más derechos, más crecimiento, pero ordenado. Queremos seguir viviendo en un Saladillo grande, ordenado, prolijo, en un crecimiento que no tenga límites, pero que sepamos hacia dónde y cómo lo pretendemos hacer».
