Javier Piñeyro, director del Hospital Dr. Posadas, habló sobre la situación epidemiológica de Saladillo. El doctor admitió que “tenemos un descenso importante de casos”, destacó la baja letalidad en Saladillo, y se lo atribuyó a que el sistema de salud local “pudo responder a las necesidades tanto cuali como cuantitativas”.
“Por suerte, en el momento de mayor tensión se pudo sostener el sistema de salud. Teníamos en total 45 camas para Covid, que fueron ocupadas en un momento, y 11 camas de terapia, las cuales hemos usado en un momento hasta 10 camas. Esto hizo que el sistema estuviera tensionado pero que pudiera dar respuesta. ¿Cómo se mide esa respuesta? Con la letalidad. La letalidad en el mundo ronda al 3% de los afectados, el 3,17% es en provincia y el 3,27% en Capital; en Saladillo, actualmente, tenemos una letalidad del 2,07%. Eso significa que el sistema de salud dio a basto, pudo responder a las necesidades tanto cuali como cuantitativas”, explicó Piñeyro.
Al ser consultado por si ya pasó el pico de la curva, el doctor respondió: “Tenemos que decir que sí, que lo que se hizo se vio y tenemos un descenso importante en los casos, lo cual distencionó el sistema sanitario. Por eso hoy decimos que no estamos como hace 15 días. Ojalá esta tendencia siga, sigamos bajando o amesetándonos, así el sistema de salud puede estar mucho menos tensionado. Pensemos que, en los momentos más difíciles, poner 10 camas de terapia en juego significó que nuestros terapistas trabajaran sin francos, hicieran dos o tres guardias, estuvieran permanentemente toda la semana dentro del Hospital”.
“La situación en Saladillo fue muy tensa, fue uno de los lugares con mayor tasa de afectación de la provincia de Buenos Aires, con niveles que superan los 4000 afectados cada 100.000 habitantes, similar a la del AMBA. Y en esta situación, tuvimos la dificultad que dos tercios de esos casos surgieron en un lapso de 30 días, lo cual hizo que la curva sea difícil de manejar desde el punto de vista sanitario”, continuó.
Piñeyro, además, remarcó: “Pensemos que un enfermo Covid que requiere ser internado usa habitualmente una máscara de reservorio como mínimo, y eso consume 16 litros de oxígeno por minuto, son 16 tubos de oxígeno que tiene que utilizar un paciente por día. Desde la logística, si no se dispone de un oxígeno central, es muy complicado sostener un Covid. Ni hablar si utiliza un sistema de alto flujo, que consume entre 30 y 60 tubos de oxígeno por día”.