Como parte de las políticas que se impulsan desde el área de higiene, seguridad y medio ambiente de la CES se desarrollan procesos a partir de un modelo de participación en gestión empresarial responsable, puntualmente, vinculado a la separación de residuos en origen en todos los sectores de la Cooperativa.
Interactuando con el área de medio ambiente municipal se trabaja en la problemática medioambiental, a partir de la disposición de cestos separadores de residuos reciclables y orgánicos, donde los reciclables, son llevados a los puestos limpios, dándoles ingreso de ese modo a la economía circular del reciclado.
Oportunidad laboral:
En el aspecto social, la sustentabilidad para el CES se orienta al acompañamiento de las personas para que mejoren su situación a partir de la generación de oportunidades. De esta manera, a través de su espacio de fomento del arte Cooparte, se abre un espacio para que profesionales y artistas locales de diferentes expresiones autogestionen oportunidades laborales con el dictado de cursos y talleres o la puesta en escena de espectáculos.
Sin embargo la articulación de lo social, productivo y ambiental se está poniendo en marcha a partir del acompañamiento de la CES a un grupo de jóvenes que realizan tareas de recolección y acopio de materiales desechados.
Desde la CES se ha comprometido la entrega de los residuos que se generan en la empresa seleccionados, para facilitar la tarea a quienes trabajan en la recolección, clasificación y venta de residuos.
El grupo de jóvenes que ha venido acopiando sistemáticamente materiales durante los últimos años, tiene como objetivo “poder desarrollar un trabajo organizado para recolectar, reciclar y comercializar lo que acopia”.
Huerta orgánica comunitaria:
A partir de un proyecto interinstitucional con la puesta en marcha de una huerta orgánica comunitaria, que involucra a jóvenes del Programa Envión Saladillo la CES aporta al desarrollo social y productivo.
“Cultivando Sueños” es el nombre que los jóvenes que forman parte del Proyecto han dado a la Huerta. La iniciativa genera entusiasmo entre las instituciones involucradas y compromiso tanto de los chicos, como de particulares que ya han brindado colaboración de manera desinteresada.
Con las tareas de huerta se conjuga la capacitación progresiva, la participación solidaria y el acompañamiento sistémico de las acciones en terreno, resultando estratégicos en su operatoria la intervención activa de promotores, el acompañamiento de las instituciones.
El desarrollo de la huerta fomenta la construcción de un ámbito de socialización y cooperación que contribuye a generar relaciones de solidaridad y ayuda mutua, entre los jóvenes y la comunidad. Asimismo genera capacidades y otorga herramientas para mejorar la calidad alimentaria de la ciudadanía, y proponiendo el consumo de una oferta diversificada de verduras y hortalizas.
El desarrollo de este proyecto tiene como finalidad que los jóvenes experimenten una alternativa de forma educativa y laboral diferente, que les permita ganar autonomía en el manejo de recursos, técnicas y procedimientos, avalados por el Instituto de Tecnología Agropecuaria INTA.
Además propone afianzar temáticas de orden de higiene, el desarrollo de hábitos y conductas orientadas al trabajo, propiciando la relación con el entorno en un intercambio cooperativo, donde todos se enriquecen.