Soledad Galíndez, directora de Bromatología, fue consultada por la competencia del área en las situaciones en las que un perro genera inconvenientes en la vía pública, sea a través de mordeduras o accidentes. Galíndez respondió que “si el animal tiene dueño se sanciona al dueño y se le pide que lo ingrese dentro de la propiedad”: además, aclaró que la “última alternativa es llevarlo a perrera”, y recordó las pautas que hacen a la tenencia responsable.
En principio, Galíndez contó que “apenas recibimos ese tipo de reclamos, cuando hay mordeduras se solicita una planilla que se da en el Hospital, en donde un profesional médico certifica que fue mordido por un animal. Una vez que se recepciona la planilla, se va al lugar y se trata de localizar al animal, porque ese animal necesita ser controlado durante 10 días por el tema del control antirrábico, y además se solicita las vacunas”.
Luego, continuó: “Si al momento que vamos el animal se encuentra en la vía pública, lo que se hace es sancionar al dueño ya que no tiene que estar generando problemas en la vía pública, sino que lo tiene que tener contenido y a cuidado de la familia. Nuestra última alternativa es llevarlo a perrera, lo cual se hace cuando corre riesgo la gente que transita en el lugar, Si el animal tiene dueño se sanciona al dueño y se le pide que lo ingrese dentro de la propiedad, eso es lo que hace a la tenencia responsable”.
“La idea no es colapsar el albergue de animales, sino generar conciencia en las personas para que los puedan tener dentro de su propiedad. Ofrecemos servicio de castración gratuito, vacunación contra la rabia… Sabemos que en el albergue no les va a faltar ni agua ni comida, pero les va a faltar lo más importante que es el cariño de una familia: por eso apostamos a no llevar los animales para allá”, finalizó Galíndez.