Cuando ya transcurrió más de medio año y la meta inflacionaria para todo el ejercicio fue superada, los sindicatos llegan al ministerio de Economía con el cuchillo entre los dientes y una amenaza de no reiniciar las clases tras el receso invernal.
Frente a este escenario, Roberto Baradel puso números al reclamo y exigió que la oferta sea del 30 por ciento y con la inclusión de la cláusula gatillo. Sin embargo, la postura de Vidal y compañía dista bastante del deseo del sindicalista.
Conforme a trascendidos, la postura en el gobierno es ofrecer un incremento de cinco puntos a lo ya ofertado. Es decir, 20 por ciento de incremento. El mismo número fue elevado en la órbita nacional con las paritarias que se cerraron en las primeras semanas del año y quedaron en 15 puntos.
Así, con una oferta del 20 por ciento, diez puntos debajo de lo planteado por una de las patas del FUDB, la historia no pareciera ser la mejor para lo que pase en la reunión del próximo lunes en el ministerio de Economía. «No veo a muchas provincias ofreciendo el 20 por ciento. Yo, por mi parte, me comprometo a dar lo que después pueda pagar», avisó la gobernadora a sus colaboradores más cercanos, según consignó La Nación.
Cabe destacar que, estos 20 puntos ya cuentan con el 50 por ciento otorgado. Es que, de manera unilateral la Provincia adelantó un aumento del diez por ciento (en dos tramos) a cuenta de paritaria, algo que no cayó bien en el gremialismo.
Por su parte, desde las filas del oficialismo apuntan contra los sindicalistas y acusan que “no quieren discutir más que salario”. En ese sentido, ponen sobre la mesa la discusión del ausentismo docente y las licencias por enfermedad.
En tanto, para dejar en evidencia la postura de los docentes, Baradel aprovechó los anuncios de María Eugenia Vidal respecto a los planes sociales el último miércoles para dejar un mensaje más que claro. “Los chicos son rehenes del abandono, la desidia en la gestión y de las mentiras de la Gobernadora”, sostuvo el sindicalista y redobló: “Los trabajadores no tomamos a nadie de rehén, reclamamos lo que es justo. Ante la falta de respuesta a los reclamos, ejercemos nuestros legítimos derechos constitucionales”.
Así, el escenario para el eterno conflicto docente en la provincia de Buenos Aires es más que complicado. El próximo lunes a las 15hs se volverán a ver las caras después de tres meses sin conversaciones y la amenaza de paro está más latente que nunca.