El salteño fue 2° en la etapa final de las dunas de Merzouga y aseguró el título, escoltando a Toby Price que ganó el rally. En los autos, Terranova ganó el especial de cierre y Al Rajhi, la carrera.
Los Benavides siguen haciendo historia. Kevin fue el vencedor del último Dakar, la primera fecha de la actual temporada, y el mejor de ellos, Luciano, se coronó en la categoría.
Luciano llegó segundo en la última etapa del Rally de Marruecos, en Mezouga, donde se hizo un «rulo» de 156 kilómetros, y de esta forma se ubicó como escolta en la clasificación general, detrás de su rival directo en la pelea por la corona, el australiano Toby Price, que finalmente se impuso en la competencia, pero no le bastó para obtener el título.
Benavides, tras la excelente actuación en el Desafío Ruta 40, en la Argentina, llegó a Marruecos en la cima del campeonato. Con llegar en el podio se aseguraba la corona.
Luego de cinco etapas en la prueba africana Price venció con un acumulado de 15h55m49s. Benavides quedó a solo 3m54s del oceánico. El podio lo completó otro sudamericano, el chileno Pablo Quintanilla (Honda), a 5m08s.
El argentino, de 28 años, logró el segundo puesto en la clasificación general de la competencia y consiguió las unidades suficientes como para mantenerse arriba en las posiciones del australiano.
Luciano tuvo un gran año con 10 etapas ganadas que le permitieron convertirse en el primer piloto argentino campeón del mundo. Para el menor de los Benavides este es su segundo cetro mundialista, ya que en 2019 ganó este mismo título, pero en la categoría Junior.
En enero irá por el Dakar, el que ya supo conquistar Kevi