El 11 de Septiembre de 1888 falleció Domingo Faustino Sarmiento, hombre controvertido y discutido si los hay, pero nadie duda ya del aporte que ha hecho a la educación del país. Como tributo a ese aporte cada 11 de septiembre se celebra en la Argentina el Día del Maestro. Al referirme a este Día tan significativo voy a reiterar conceptos que ya he expresado en otras oportunidades para esta fecha. Considero que el Maestro después de la Madre y del Padre, es la figura más importante en la vida de un ser humano. Seguramente en el futuro se promoverán nuevos sistemas pedagógicos, se crearán nuevos ámbitos y formas de aprendizaje e instrucción. Aparecerán nuevas tecnologías, se harán los esfuerzos para mejorar los edificios de las escuelas y los colegios y tal vez se creen edificios inteligentes. Pero hay alguien que es más importante que los edificios, que los sistemas pedagógicos y que las tecnologías y ese alguien es el Maestro porque contribuye a crear el clima emocional del aprendizaje, no hay nada ni nadie que pueda reemplazarlo. Siempre he dicho que el futuro de un país se juega en las aulas, y la escuela es la llave que nos abre las puertas hacia el futuro y el maestro es la guía irreemplazable hacia ese camino: el del futuro. Siguiendo el pensamiento de Guillermo Jaim Etcheverry expuesto en su libro:»La Tragedia Educativa» debo sostener que no debemos desatender a la Escuela Pública y a los Maestros, porque si desatendemos a la Escuela y a nuestros Maestros abandonamos a nuestros niños y si abandonamos a nuestros niños: no nos importa el futuro y si no nos importa el futuro la vida no tiene sentido. Y si no hay futuro qué importancia tiene si hay déficit fiscal o no. Siempre he dicho en mis discursos: Primero: la educación, segundo: la educación, tercero: la educación, cuarto: educación, quinto: la educación. Siempre: la educación. Siempre recuerdo a todas mis maestras de la escuela primaria con gran afecto. Quiero hoy rendirle mi homenaje a todas ellas en las personas de Nélida Toscanini de King( que fue mi maestra de primer grado),Rosa Cotignola de Conti( mi maestra de tercer grado) y Elsa Mussumano de Delrieu( mi maestra de séptimo grado) y en ellas a todas las maestras de mi pueblo y del país, a las que están actividad y a las que se jubilaron, porque siempre se es docente nunca se deja de serlo. Los maestros nunca se jubilan siempre siguen enseñando dentro y fuera del aula. A mis maestros el agradecimiento eterno ellos me brindaron instrumentos para desenvolverme en la vida. Creo que eso ha pasado en cada uno de nosotros con nuestros respectivos maestros. Por todo ello y por mucho más, que me llevaría horas y horas escribir digo: primero: los maestros, segundo: los maestros, tercero: los maestros, cuarto: los maestros, quinto: los maestros. Siempre los Maestros. Feliz Día Queridos Maestros!!!! Carlos Antonio Gorosito Ex- Intendente Municipal, Saladillo 11 de septiembre de 2018