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“Se trata de una encuesta que muestra una clara postura ante una problemática que parece muy difícil de solucionar, como es la de los peligros relacionados a la gente que maneja luego de tomar más alcohol del permitido. Además, sirve para proyectar un pedido para que las autoridades tomen cartas en el asunto y sumen más controles”, sostuvo el Defensor del Pueblo, Guido Lorenzino.
El informe indica que casi el 80% aprueba que se aplique el alcohol cero. De estos, un 37,9% cree que de esta forma pueden disminuir los siniestros, y un 46,4% considera que esta propuesta tendría éxito sólo si se controla su aplicación.
A su vez, un 74% consideró la posibilidad de que se introduzca un sistema de puntos para los conductores que, en el caso de que se cometan infracciones, se le resten unidades y se le apliquen penalidades (muy de acuerdo el 46,8% y de acuerdo el 27%).
Cuando se preguntó cuán a menudo encuentran los controles de alcoholemia, el 54,9 de los conductores aseguró no verlos nunca y un 25,2% casi nunca. En tanto, casi el 67% consideró que estos puestos están orientados a recaudar y no a mejorar la seguridad vial.
Los conductores y las leyes
El trabajo de la Defensoría también profundizó sobre el conocimiento que tienen los conductores sobre las normas relacionadas que penalizan la ingesta de bebidas alcohólicas. La mayoría sabe qué cantidad de copas de vino o de cerveza a partir de la cual el test da positivo e, incluso, conocen la penalidad que les cabe en caso de que esto suceda.
Además, al consultar el comportamiento que tienen cuando toman alcohol, el 71,6 manifestó que si conducen no beben nunca; el 26,6% expresó que controlan la cantidad de alcohol que beben previamente; y el 1,3% indicó que no controlan demasiado la cantidad de alcohol que beben.
La encuesta, a su vez, diferenció las respuestas entre géneros y edades. Como rasgos sobresalientes, se observó que las mujeres son las más precavidas al volante y que los jóvenes son los que mayor cantidad de respuestas correctas obtuvieron al hablar de la cantidad de alcohol permitida y el tiempo que tienen que dejar pasar para volver a manejar en el caso de que hayan bebido.
“Campañas efectivas”
“Debemos comprometernos de verdad. Los siniestros viales son un drama que golpean a diario y la mayoría de ellos podrían evitarse. Hay que hacer campañas basadas en la educación vial, el respeto a las normas y al otro, y controles que sirvan para evitar que siga reproduciéndose esta dura realidad”, sostuvo Lorenzino.
En ese sentido, agregó que “la Defensoría buscará colaborar con los municipios para que lleven adelante acciones efectivas que muestren la realidad del problema y que fortalezcan los controles para evitar que sigan perdiéndose tantas vidas por culpa del manejo irresponsable”.