Los que ganen hasta 185 mil pesos cobrarán por única vez 24 mil y los del Potenciar, 13.500, montos menores a lo esperado. Por qué no se usó la suma fija de CFK.
Luego de meses de idas, vueltas e indefiniciones, y cuando el año ya está casi cerrado, el Gobierno Nacional finalmente anunció que habrá dos bonos de ayuda para el bolsillo de los trabajadores, en un 2022 en el que la inflación terminará orillando los 100 puntos y los montos a percibir son bastante más bajos de los que se venían discutiendo, algo que ya despertó fuertes críticas de parte de los movimientos sociales.
En una conferencia de prensa conjunta en Casa Rosada, las ministras de Trabajo, Raquel «Kelly» y de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, anunciaron que se pagarán dos variantes, un bono para trabajadores del sector privado en relación de dependencia que no superen los 185 mil pesos de ingresos y otro para aquellos beneficiarios del plan Potenciar Trabajo. En el caso de los asalariados privados, el bono será por unica vez y un monto de 24 mil pesos, mientras que en el de los planes, el valor será de 13.500 pesos totales, a pagarse en dos veces, una el 21 de diciembre y otra el 6 de enero. Esto se verá reflejado con mayor detalle, según adelantaron fuentes oficiales, en las próximas horas, cuando se publique el decreto presidencial.
En este escenario, hay dos datos a mirar: el primero, que ambas variantes de los bonos tienen montos muchos más bajos a lo esperado en relación a la idea de recuperar poder adquisitivo del salario. Y en segundo lugar, que tras meses de no dar pistas de si se haría o no, el bono le gana finalmente la batalla a la suma fija que pedía el kirchnerismo con la idea de que ese dinero se incorpore formalmente al salario básico, elevando el piso para pelear la paritaria 2023.
El tema es delicado porque está en debate desde octubre y se habían pedido entre 40 y 50 mil pesos a modo de compensación, a pagarse desde entonces y por varios meses hasta fin de año. Inclusive, cuando el Gobierno planteó que el bono era más apto que la suma fija, la expectativa era que se encontrara la manera para que lo percibieran no solo los trabajadores en relación de dependencia, sino los privados informales, que son muchos más. En síntesis, este bono es prácticamente igual que una suma fija que pedía el kirchnerismo en cuanto a universo alcanzable, pero con la contra de que no se suma al básico, es decir, no tiene impacto real en el sueldo. Una diferencia muy fuerte.