Marcos tiene las ideas claras: “lo daré todo, no veo la hora de salir al campo con esta camiseta»
Un martes con doble entrenamiento para el Trieste a las órdenes del técnico Eugenio Dalmasson, que se han desarrollado desde las 10 y 17 de la tarde, para preparar mejor el partido ante el Palaleonessa de Brescia.
En el medio, una cita que es un clásico para el inicio de temporada, la del LBA Media Day: sesión de fotos y entrevistas en vídeo para profundizar en el conocimiento de los integrantes del primer equipo.
El nuevo fichaje Marcos Delía, que también quería presentarse a sus nuevos fanáticos, sonreía frente al lente de la cámara: «No veo la hora de volver a la cancha, estoy ansioso por volver a jugar – dijo el pívot argentino – Me entrené todo el verano de forma individual. Trabajé mucho en mi cuerpo y en mis fundamentos. Tengo que encontrar el ritmo del juego, eso vendrá cuando pueda estar en el campo de juego, pero estoy convencido de que mis compañeros me ayudarán mucho para adaptarme lo más rápido posible. El domingo estuve en el Allianz Dome viendo el partido y lo que me llamó la atención primero es la química que hay en él equipo. Después el corazón. Sé que hay varias lesiones, pero ninguno de los que salieron al campo cedió ni un centímetro y lo dejaron todo en la cancha. Jugar en un equipo con esta actitud es una gran oportunidad para mí”.
Comparado con su relación con Lobito Fernández, Marcos está convencido de que “Juan será importante para mi integración en el equipo. Lo conocía bien antes de venir a Trieste, jugamos juntos en la selección nacional. Seguí su pasada temporada, es una cosa que trato de hacer con todos los chicos argentinos que juegan en las Ligas. Lleva varios años aquí en Trieste, conoce bien el club, la ciudad”.
El argentino tiene muchas ganas de decirle a la afición que «daré lo mejor de mí. No veo la hora de salir al campo con esta camiseta y verlos en la grada. Por supuesto que será diferente pero espero poder volver a ver esas gradas llenas de las que Juan habló, porque para un jugador no hay emoción más bonita”.