Camila Elordieta y Tiara Oyhanart son dos chicas de 16 años oriundas de Del Carril, pueblo con el cual tienen un gran sentido de pertenencia. Juntas transitaron el jardín y la escuela primaria y secundaria; además, comparten su pasión por el fútbol. También fueron las dos juntas a probarse a diferentes clubes y seleccionados, hasta que les llegó una oportunidad histórica para el fútbol de la Liga de Saladillo: ya debutaron en la Reserva de Gimnasia de La Plata, y se afianzan como un gran proyecto del club.
Las carrileras jugaron gran parte del año en Defensores, el club de la localidad, compitiendo en la Liga de Fútbol de Saladillo. Cuando quedaron seleccionadas en Gimnasia, club que milita en la Primera División del fútbol argentino, se acomodaron días y horarios para no desaprovechar la oportunidad. Este año ya tomaron la decisión de mudarse juntas a La Plata, con el acompañamiento de sus respectivas familias.
«Decidimos irnos a vivir allá, más que nada por la escuela. No nos daban los horarios, porque entrenanos cuatro días a la semana a la tarde y jugamos otro día (…) Tomamos el micro para ir a Estancia Chica a cinco cuadras del departamento«, contó Camila.
Acerca del ‘lado b’ de la convivencia, las chicas contaron que Tiara es la que limpia el departamento y Camila, la que cocina: «Hacemos los mandados allá y después nos dividimos. Nos gusta la convivencia; nos visitan amigas que hicimos en Gimnasia, vamos a ver vóley o básquet al polideportivo de Gimnasia que queda a tres cuadras».
Tiara, además, habló un tema incluso más importante que sus carreras futbolísticas. Las chicas pasaron a 5° de la escuela secundaria, aunque continúan en la búsqueda de un establecimiento: «Nos recomendaron una escuela en Gimnasia, pero todavía no abrieron las inscripciones y hay que tener suerte«. Además, agregó: «El mismo club te exige que no pierdas el estudio. Prefieren que te quedes estudiando antes de ir a entrenar».
Por otra parte, Camila contó que en lo personal ellas ven un progreso en cuando a su juego: «Se nota mucho el cambio, son muy distintos los entrenamientos. Nos exigen que demos lo mejor para ganarnos el puesto, porque nadie lo tiene asegurado».
«El predio está hermoso. Cuando están las chicas de Primera, nos toca entrenar en una cancha hermosa» aseguró Elordieta, y además contó que conocieron también los predios de Estudiantes de La Plata y de Lanús.
Cuando fueron consultadas por un mensaje que les darían a todas las jóvenes de la Liga de Saladillo que sueñan con tener contacto con el fútbol profesional, las chicas insistieron en «que no pierdan ninguna oportunidad. Nosotras fuimos de acá para allá; estuvimos en Olavarría, en River, a diferentes pruebas. A pesar de no quedar en algunas, seguíamos y seguíamos yendo hasta lograr quedar en Gimnasia. Estamos re contentas de estar acá (…) y es cierto que es una familia, los jugadores y jugadoras van a todas las disciplinas».