Las mayores bajas de precios, según lo expuesto en los sitios especializados en reventa, se da entre las las plateas, que habían salido a la venta el sábado en Mendoza con valores de $2200 para las descubiertas y $3200 para las techadas.
La caída en los valores de las entradas se debe a que los revendedores tienen aún muchas entradas. El exceso de oferta, como en cualquier otro mercado, lleva los precios a la baja. Más aún en la proximidad del partido.
Para hinchas de River, los montos mínimos de reventa habían llegado hasta los $4000 (descubiertas) y con topes de $13.000 para las preferenciales. Sin embargo, la proximidad del partido desinfló los precios: un simpatizante millonario ya puede conseguir su platea por $2000.
Para los hinchas de Boca, la situación es similar. Las plateas, que hasta ayer tenían precios mínimos de $4150 y máximos de $11.900, ahora parten desde los $2300 para las descubiertas.
Fuente: Archivo – Crédito: Mauro V. Rizzi
La baja de precio también alcanzó a las populares, que se habían puesto a la venta la semana pasada a $800 (fueron alrededor de 9000 para cada equipo) y se agotaron en apenas 15 minutos.
En los días posteriores, el precio de reventa para los hinchas de River llegó a tocar los $2000 por una entrada general, con máximos de hasta $6000, dependiendo del vendedor. A horas del partido, no obstante, esas localidades se pueden conseguir desde $1560.
La misma situación ocurre con las populares para la tribuna xeneize. Días atrás, las populares más baratas en la reventa triplicaban el precio oficial y arrancaban en $2766 y podían llegar a $7000. Los precios se derrumbaron horas antes del partido: ahora se consiguen por $2000.