María Isabel Speratti Aquino ya había denunciado por violencia de género a Gabriel Núñez. El femicida llevaba el arma en el auto cuando fue detenido.
Una mujer fue asesinada de cuatro balazos por su expareja cuando salía de su casa para llevar a los hijos a la escuela en la localidad de Cañuelas.
María Isabel Speratti Aquino, la víctima de 40 años, fue sorprendida por Gabriel Alejandro Núñez, su expareja de 47 años que había sido denunciado por violencia de género, cuando abría la puerta de su casa para llevar a sus dos hijos al Colegio Don Bosco de Uribelarrea.
Sin mediar palabra, Nuñez le disparó cuatro veces a Speratti Aquino y uno de esos disparos le impactó en la cabeza. La mujer fue trasladada rápidamente al Hospital Regional Cuenca de Cañuelas, donde llegó en estado crítico y murió poco después del ataque de su expareja.
Vecinos del barrio Las Rosas de Cañuelas relataron que Aquino les había hecho una advertencia sobre la agresividad de su exposo. En julio de 2019, en un chat grupal de WhatsApp, les contó que había radicado una denuncia contra él por violencia de género y solicitado una restricción de acercamiento.
“Me agredió y casi me mata”, alertó en un mensaje que estuvo acompañado por dos imágenes: una de la cara de su ex y otra de su auto. Fue en ese mismo auto en el que fue detenido el atacante.
La detención fue pocos minutos después del crimen, cuando Núñez circulaba por el centro de Cañuelas a bordo de una Volkswagen Suran gris. Allí, efectivos policiales lo interceptaron y encontraron en el vehículo una pistola Bersa 380 9mm que sería el arma con el que cometió el femicidio.
En aquel grupo de WhatsApp en el que advirtió sobre el comportamiento de su expareja, María Isabel le había pedido a los vecinos que si lo veían por la zona lo denunciaran. Sin embargo, este jueves el femicida apareció de golpe y nadie llegó a detenerlo.
El ataque se produjo cerca de las 7.30 cuando la víctima estaba por salir con sus hijos rumbo al Colegio Don Bosco de Uribelarrea. El femicidio fue veloz: Núñez la mató y escapó en cuestión de segundos.
La pareja se había mudado de Virrey del Pino a Cañuelas en 2010. Pero la relación del matrimonio se deterioró hasta que en 2021 ella lo denunció y Núñez se fue de la casa. “Un patrullero estuvo dando vueltas por el barrio como dos meses, pero después, como sucede siempre, dejó de venir y sucedió lo previsible”, cuestionó vecino al sitio InfoCañuelas.
