Alejandra Madero es una auxiliar docente que se fracturó los dos brazos y se fisuró el codo tras la caída de una gran rama de un árbol en el Acceso Cicaré. La daminificada se mostró dolida por la inasistencia del Estado ante un hecho que bien podría haberse evitado, y además contó cómo empezará su proceso de recuperación: «Estoy esperando el material que me tienen que colocar, que en esta semana llegaría, porque me cubre todo el tratamiento la ART de mi trabajo.»
«Cuando salí de trabajar a las 13 y me dirigía a mi casa en barrio Los Troncos, en el Acceso Cicaré (enfrente de una planta de silos) se me cae un tronco de gran tamaño y me quiebra los 2 brazos, yo iba en moto. Cuando caí al pasto, ya casi con los 2 brazos quebrados, me los quebró el tronco, no es que me los quebré al caer al piso. Cuándo caí ya no sentía los brazos, pensé que me los habían cortado. En el izquierdo tengo una fractura y el derecho es el más comprometido porque tengo doble fractura y el codo fisurado«, detalló Alejandra.
Luego, Madero habló de la inasistencia por parte de los responsables: «De vialidad nadie se ha acercado, y de la Municipalidad solo el día del accidente, que se hizo presente en el hospital el delegado de Saladillo Norte, y una asistente del CAPS de Saladillo Norte que llamó a mi hermana, después nadie más».
«Después de lo sucedido, 9 empleados de vialidad estaban cortando las plantas, cosa que me parece una falta de respeto, se hizo tantos reclamos que tiene que pasar algo para que actúen», agregó Alejandra.
«Lo de la moto es un daño material, sólo me preocupa quedar bien de mis brazos, es lo que utilizo para trabajar, ya que soy auxiliar de educación. Solo mi familia, amigas, vecinos, y compañeras de trabajo y los directivos de dónde estaba trabajando me acompañan y ayudan. En lo cotidiano en lo de todos los días, para darme de comer (me tienen que dar todo en la boca), bañarme, vestirme, sólo mi familia. Y así, más o menos, tengo para 6 meses», cerró Alejandra.