El ex subsecretario de Obras Públicas durante el kirchnerismo, José López, decidió romper el silencio en el juicio que se lleva adelante en su contra por presunto enriquecimiento ilícito declaró que «el dinero de los bolsos no es mío», dijo, sin dar nombres, que era «de personas de la política» y que lo usaron a él como «una maniobra distractiva».
En el comienzo de la audiencia, López, quien lleva más de dos años detenidos desde que fuera encontrado arrojando bolsos en un convento en la madrugada del 14 de junio de 2016, comenzó diciendo que sólo respondería las preguntas que le formulara su abogada y continuó con un extenso relato de cerca de una hora en el que aclaró que apenas fue preso «no tuve la libertad para elegir a mi defensa», dijo que la casa del Tigre no es de su propiedad y que la «alquiló con opción de compra», afirmó que no se enriqueció de manera ilícita mientras fue funcionario y que el dinero secuestrado aquella noche no era de él si no «de personas de la política» y que lo terminaron usando «como maniobra distractiva».
Acá, las frases salientes del testimonio:
– «Después de mucho pensarlo, voy a declarar siempre que no ponga en riesgo la seguridad de mi familia y la mía propia»
– «No tuve libertad para elegir mi defensa, y esto quedó evidenciado con mi primera defensora, que me la pusieron, que jamás la hubiese elegido voluntariamente y que me costó mucho esfuerzo que la cambiaran»
– «Voy a declarar porque quiero que se demuestre que no me enriquecí ilícitamente en la función pública. Ni yo, ni mi esposa ni ningún integrante de mi familia se enriqueció mientras fui funcionario»
– «Poseo las mismas propiedades que tenía en 2003. Sólo sumé un bote y dos terrenos, uno fiscal en El Calafate y otro en el sur de Tucumán»
– «Los ingresos que tuvimos durante mi gestión fueron consistentes con los egresos que tuvimos año a año durante mi función»
– «Mi esposa siempre estuvo al margen de mi actividad laboral y política»
– «Con respecto a la casa de Dique Luján, simplemente firmé un contrato de alquiler con opción de compra»
– «Ni Galera ni Gutiérrez son mis testaferros»
– «Esa propiedad no forma parte de mi patrimonio»
– «No puedo dar detalles de los bolsos por el riesgo de mi familia»
– «A mediados de 2016, estando en Montevideo, un parlamentario me dijo `nos están investigando a vos, a mí y a Rossi desde la SIDE´»
– «Corroboré interferencias en mi teléfono y correo electrónico y observaban cerca de mi domicilio»
– «Después tuve una reunión sobre la que no puedo dar detalles pero sí decir que a partir de allí resulté obligado a quedar a disposición para realizar algunas diligencias que luego me irían diciendo. La primera, y por lo tanto la única, fue de la que estamos hablando aquí, el tema de los bolsos»
– «Ese dinero no es mío. Y cuando antes señalé que es dinero de la política es porque así me lo indicaron»
– «Ese dinero es de personas vinculadas a la política de las cuales no puedo hablar. No es una persona si no varias. Yo mismo no sé quiénes son ni quiero saberlo»
– «La diligencia encomendada consistía en que debía trasladar esos bolsos al convento al que yo conocía y tenía entrada, entendiendo que a partir de allí se los iría retirando para darles otro destino»
– «A las monjas no había que darles precisiones»
– «Al lugar llegué solo, me escoltaron tres personas, una en una moto y dos en un auto. Cuando digo que me escoltaron no digo que eran simples acompañantes, sino que eran los que me dieron el dinero y me siguieron todo el camino a modo de control. Por ese motivo dejé el auto en marcha mientras realizaba el traslado. El dinero que quedaba en el auto era custodiado por esas tres personas que se quedaron a una determinada distancia mientras realizaba la tarea»
– «A esas tres personas no las conocía, pero seguramente eran personas de seguridad. Mi señora nunca supo nada de esto, no estaba enterada de lo que yo haría, y el resto de mi familia tampoco»
– «Mi señora sí notó el estado de nervios que tenía, que parecía que estaba como loco y temió que pudiera quitarme la vida. Pero como yo no le decía nada ella lo tomó por otro lado. Hasta discutimos por una cuestión de celos»
– «Lo secuestrado esa noche no me pertenece, le pertenece a otras personas cuyas identidades no puede revelar y mi intervención en el traslado al convento fue forzado»
– «Me arrepiento de no haber tenido la claridad y fortaleza de no haber resistido las presiones que sufrí»
– «El dinero lo llevaron esa noche las mismas tres personas que me escoltaron»
– «Me usaron como como un chivo expiatorio, como una maniobra distractiva para poner la atención pública en otro lugar y yo no tuve otra alternativa que obedecer»
Tras finalizar con el relato, la abogada le formuló algunas preguntas más y el testimonio de López se interrumpió de manera abrupta cuando el ex funcionario dijo «no voy a declarar más».
