“No tiene límites”, coinciden los dirigentes desplazados del Partido Justicialista sobre el rol del interventor, Luis Barrionuevo. Por eso, ante la amenaza del sindicalista de avanzar en los distritos, los bonaerenses comenzaron a moverse con velocidad: el próximo martes en Cañuelas se mostrarán juntos para dar señales de que se trata de un partido activo y con los papeles en orden.
Aunque los peronistas esperan un fallo favorable de la Cámara Nacional Electoral, en las semanas que durará la intervención, Barrionuevo amenazó con poner la lupa en los partidos provinciales, entre ellos, el bonaerense. Ante esto, los bonaerenses ya ordenaron los papeles y convocaron a una reunión del consejo, que debe realizarse una vez por mes.
En Cañuelas, las diferencias que existían hasta ahora entre distintos legisladores e intendentes, quedarán saldadas: todos unidos contra Barrionuevo. Con la excusa de analizar la situación política, social y económica que atraviesa el país, el PJ conducido por Gustavo Menéndez (intendente de Merlo) y Fernando Gray (Esteban Echeverría), harán un fuerte repudio a la intervención dispuesta por la jueza María Romilda Servini.
El titular de la Uthgra asegura que en estos días habló con distintos peronistas que apoyan “la reconciliación del peronismo con la democracia” que les dice impulsar. Sin embargo, hasta ahora mostró que a su lado sólo están Julio Bárbaro y Carlos Campolongo.
Este jueves, en el salón “Juan Carlos Mazzón” en donde realizó la conferencia de prensa con un auditorio colmado, fue imposible reconocer a algún peronista de peso. En cambio, se vio a varios trabajadores del sindicato alentados a cantar la marcha peronista por Carlos Pascual Tula (quien esta vez no llevó el bombo) y Hugo Fontana, hijo del cantante Hugo del Carril.
“Es divertido porque tanto Barrionuevo como Bárbaro dijeron públicamente que en 2015 que trabajaron para que Mauricio Macri gane. Incluso Barrionuevo dijo que puso fiscales para ayudarle a controlar la elección a Cambiemos. Ahora, públicamente quedaron solos, pero podría sentarse Marcos Peña a su lado porque está claro que acompañándolos tienen que estar los miembros del gobierno”, respondió un dirigente sobre la convocatoria del interventor para reorganizar el partido.