La ex mujer de Alberto Nisman, la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado, definió hoy la muerte del ex fiscal como «un magnicidio que cruzó una raya en la Argentina» y afirmó que la causa judicial que investiga lo sucedido hace tres años transcurre «en una instancia donde las calificaciones son provisorias».
«En esta instancia, las calificaciones (de la causa judicial) son provisorias y creo que habría que repensar si no ocurre algún agravante que califica a los homicidios», dijo Arroyo Salgado, querellante en la causa a cargo del juez Julián Ercolini, al cumplirse hoy el tercer aniversario de la muerte del entonces titular de la UFI-AMIA, quien fue hallado sin vida de un balazo en la cabeza en el departamento en el que vivía en Puerto Madero.
En ese sentido, consideró que «habría que replantear el concurso premeditado de dos o más personas (en la muerte de Nisman) ya que el juez habla de un plan criminal» al señalar que el Código Penal -en su artículo 80- «no contempla como agravante de homicidio en el caso de que la víctima sea un juez o fiscal con motivo de su cargo o condición».
«Si algún legislador está escuchando sería muy importante (incorporar esta figura en el Código Penal) porque, con el magnicidio de Nisman, se trazó una raya», dijo la jueza y madre de las dos hijas de Nisman en declaraciones formuladas esta mañana.
Con respecto a la investigación judicial, Arroyo Salgado, se consideró «realista» al explicar que «va a ser muy difícil avanzar en cuanto a despejar todos los que estuvieron detrás de este plan criminal».
El ex fiscal fue hallado muerto pocos días después de haber denunciado penalmente a la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner y otros funcionarios y dirigentes kirchneristas, por el presunto encubrimiento de los iraníes acusados del atentado a la AMIA, a raíz de la firma del finalmente fallido Memorándum de Entendimiento con Irán.
En la causa judicial por presunto «homicidio» que lleva ahora por Ercolini, el magistrado procesó al técnico informático Diego Lagomarsino por supuesto «partícipe necesario» de lo que definió como un «plan criminal».
Esta mañana está prevista la realización, al igual que los dos aniversarios anteriores, de un homenaje al fallecido fiscal en el cementerio de La Tablada, donde descansan sus restos, organizado por la AMIA.