El dólar se derrumbó en el mundo y bajó en una Argentina en la que las tasas no dan respiro

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La debacle del dólar en el mundo, más la dureza que muestra el Banco Central en las tasas de interés, conformaron un arma letal que hizo que la divisa norteamericana bajara por cuarta rueda consecutiva. Desde Navidad hasta la fecha, el dólar cayó más de 2% y está a 27 centavos de que el Banco Central salga a sostenerlo comprando USD 50 millones por día.

A su vez, el Banco Central le envió un recordatorio al mercado en la licitación de Letras de Liquidez (Leliq). Renovó $ 153.171 millones, cuando tenía que afrontar vencimientos por $ 118.269 millones. Es decir que sacó de circulación $33.102 millones. En dos días quitó casi $ 70 mil millones. La tasa de corte la bajó 0,14 puntos a 59,60%, pero la tasa promedio a la que colocó las Leliq fue de 59,43% anual contra 59,41% del día anterior. Hay que recordar que estos bonos que son solo para los bancos se emiten a 7 días de plazo y generan una monumental deuda del Banco Central con el sistema.

La caída del dólar, que el Gobierno toma como una bendición, dejó en las últimas ruedas un beneficio adicional: la baja del riesgo país. Desde el 27 de diciembre, cedió 7,23% a 769 puntos básicos. Si bien el nivel sigue siendo uno de los más altos del mundo ha mejorado la paridad de los alicaídos bonos locales.

Desde Navidad hasta la fecha, el dólar bajó más de 2% y está a 27 centavos de que el Banco Central salga a sostenerlo comprando USD 50 millones por día

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La explicación está en que el dólar bajó más que los bonos. Por caso, en el mercado mayorista cerró con una caída de 24 centavos a $37,45 (-1,22%), mientras el Bonar 2024, el bono de referencia de la deuda en dólares, subió 0,12%.

El dólar mayorista tuvo otro día de viento en contra. Cada vez que trabajosamente ensayaba una recuperación, era barrida por la aparición de vendedores. El máximo de $37,60 lo tocó a principio de la rueda. Después, fue un serrucho descendente que lo llevó a cerrar en el menor nivel del día.
Los inversores estaban bajo fuego cruzado. Desde el exterior lidiaron con el derrumbe de casi todas las bolsas tras el fuerte comunicado de Apple avisando que va a tener menos ganancias por el conflicto con China y por el desmejoramiento de la economía mundial. Si lo dice algún economista o empresa poco notable, el aviso hubiera sido uno entre tantos similares. Pero lo dijo Apple que tiene negocios en China por USD 40 mil millones y una elevada ponderación en los índices bursátiles.

La divisa bajó 23 centavos y cerro en $38,51 (Adrián Escandar)
En Nueva York el Dow Jones perdió 2,83%; el S&P 500, 2,48% y el indicador de las tecnológicas, el Nasdaq, 3,04%. Los Bonos del Tesoro a 10 años tuvieron una importante suba y el rendimiento bajó a 2,55%. El otro refugio fue el oro que aumentó casi 1% y en poco más de 3 meses acumula alzas por 9%.

Que estos activos sean los más buscados junto a los títulos alemanes, indican que hay tormenta y los más cautos están buscando cobertura. El mundo está sobre endeudado después de años de tasas bajas. Una mala noticia para los países emergentes que pronto verán bajar sus bonos y acciones y se les encarecerá la deuda.

Desde el 27 de diciembre, el riesgo país cedió 7,23% a 769 puntos básicos. Si bien el nivel sigue siendo uno de los más altos del mundo ha mejorado la paridad de los alicaídos bonos locales
En la Argentina, todo se tradujo en una caída del dólar de 23 centavos a $38,51. El «blue» perdió 25 centavos y cerró en $40,25.

Las reservas perdieron USD 11 millones a 65.814 millones, a pesar de que por la suba del oro y del euro se ganaron 19 millones y que hubo un solo pago a Brasil por USD 1 millón.
La contracara del pesimismo fue Brasil. La confianza en la gestión de Bolsonaro, crece. Anunció privatizaciones y la Bolsa de San Pablo le respondió con un nuevo récord al subir 3,56%. El dólar cayó 1,7% frente al real. Es un alivio para la Argentina que su principal cliente también este revaluando su moneda.

La Bolsa local que comenzó con una leve alza, de 0,71%, cambió pronto de humor. A las 12.15 estaba 1,66% abajo y terminó la rueda con un retroceso de 0,10% y con más operaciones que el día anterior porque se negociaron $515 millones. Petrobras (+1,94%) fue el papel más buscado y el responsable de que la baja no fuera más aguda. YPF ayudó con un aumento de 0,95%. La mayor caída la tuvo Mirgor (-4,25%), la empresa vinculada a la familia Caputo y de la que alguna vez tuvo acciones Mauricio Macri.

En Wall Street los ADR’s argentinos tuvieron un comportamiento equilibrado. Los certificados de acciones que cotizan en dólares que más se destacaron fueron Banco Francés (+1,51%) y Banco Macro (+1,12%). La caída más importante fue la de Telecom Argentina (-3,40%) y la de IRSA Propiedades Comerciales (-3,33%).

Después de hora, el dólar siguió cayendo contra las demás monedas en el mundo. Se espera otro día agitado. La salida de inversores de Wall Street es preocupante. La incógnita es por cuánto tiempo más los inversores locales van a seguir apostando al peso en un mundo convulsionado.