Mientras la Copa del Mundo no para de dar sorpresas, Brasil hace lo suyo y sigue avanzando. El conjunto de Tité tuvo a un gran Neymar y un funcionamiento de equipo aceitado, que dejó a México sin el sueño de acceder a los cuartos de final, tras vencerlo 2 a 0 con autoridad.
Después de un primer tiempo trabado y friccionado, pero que siempre tuvo a Brasil con el dominio de las acciones y las llegadas, el conjunto verdeamarelo se impuso en el complemento.
Al inicio, Neymar interceptó un remate cruzado de William y destrabó el partido. De allí en más, el dominio fue absoluto. El propio número 10 fue amo y señor del juego. El mediocampo, con rotación y circulación (sobre todo de William y Coutinho) fue el motor de un equipo sólido y amalgamado que con el correr de los días se acomoda mejor.
En el final, cuando México se animaba con algunos pelotazos frontales, intentando llegar al empate, Brasil encontró un espacio de contra, que aprovechó Ney y tras la definición defectuosa del astro, Firmino capitalizó el robeto de Ochoa para empujarla y cerrar el resultado.
Brasil sigue caminando firme en esta Copa del Mundo y, a pesar de las dudas que dejan las grandes selecciones, saca chapa partido a partido y ahora esperará en los cuartos de final por el ganador de Bélgica-Japón.
