El equipo de Bahía Blanca descendió una fecha antes de que finalice el torneo de la B Nacional. La salida de un dirigente de peso, los pases de factura y las decisiones arbitrales fueron demasiado para que pierdan su plaza en Primera.
“Había una vez un club que había llegado a codearse con los poderosos de la Primera División, a decir verdad quien era su presidente lo había logrado mucho más aún que el propio club. En esos días su palabra era sagrada pero un día las cosas cambiaron. El club caía mientras él crecía: tanto fue la brecha entre él y lo que creía “su club” que un día perdió el apoyo de la gente y el club dejó de pertenecerle.
En los pasillos se comenta que el señor con más poder dentro de aquel deporte que apasiona a todos, le dijo al nuevo derrotado: “Decidí vos hasta dónde querés que bajen, después va a ser tuyo de nuevo”.
La historia debe ser contada así porque, quien jura y perjura ser testigo de aquella charla, no tiene las pruebas para demostrarlo.
Olimpo de Bahía Blanca viene viviendo una tormenta institucional desde fines de 2017 cuando la lista de Mauro Altieri venció al oficialismo de Alfredo Dagna. El panorama de aquel entonces era desolador. “Tenemos un pasivo documentado de 70 millones de pesos y creemos que las deudas son mayores. Hay deudas con casi todos los proveedores. Desde transporte hasta con la gente de los químicos de limpieza de la pileta”, le contaba la dirigencia a INFOCIELO por aquel entonces.
Fuente: infocielo