Se trata de una docena de periodistas que conducirán los debates del 13 y 20 de octubre y del 17 de noviembre, en caso de una segunda vuelta.
La Cámara Nacional Electoral (CNE) definió los nombres de los doce periodistas que moderarán los debates presidenciales del 13 y 20 de octubre, y del 17 de noviembre en caso de una segunda vuelta de las elecciones.
María Laura Santillán, Rodolfo Barili, Gisela Vallone y Guillermo Andino tendrán a cargo la moderación del debate del 13 de octubre, que se realizará en el Paraninfo de la Universidad Nacional del Litoral, en la ciudad de Santa Fe.
En tanto, los periodistas María O’Donnell, Marcelo Bonelli, Mónica Gutiérrez y Claudio Rígoli estarán a cargo de conducir el debate del 20 de octubre, en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
Finalmente, en el caso de una segunda vuelta, Viviana Canosa, Daniel López, Cristina Pérez y Alberto Lotuf serán los periodistas encargados de moderar el tercer debate, previsto para el 17 de noviembre, también en la Facultad de Derecho de la UBA.
Los nombres fueron conocidos a través de una resolución de la CNE difundida esta tarde. Los nombres fueron elegidos por la Justicia Electoral luego de que los representantes de cada fuerza política propusieran distintos criterios para la selección.
En esa misma resolución se detalló que el rol de los moderadores «debe ajustarse estrictamente» a las pautas establecidas por el guión y la producción de los organizadores del debate.
En caso de aceptar las propuestas, los periodistas elegidos «se desempeñarán ad honorem y deberán suscribir un compromiso de aceptación de los términos y condiciones de su actuación».
Entre los criterios para la selección de los moderadores, se tuvo en cuenta que la labor estuviese a cargo de duplas conformadas por una mujer y un hombre con el objetivo de «resguardar la paridad de género».
Por otra parte, la Justicia Electoral consideró que los moderadores deben ser conductores de programas periodísticos de canales de televisión de alcance nacional y se estableció «la necesidad de que haya moderadores oriundos de las provincias argentinas».
«A través de una postulación anónima, los representantes de los candidatos pusieron a consideración del Tribunal sus preferencias y esos puntos en común de esas propuestas fueron tenidos en cuenta por la Cámara» para la selección de los nombres, según se informó.