Enfrentaron un juicio abreviado. Ellos negaron haber disparado. «Me daba mucha bronca verlos. Hablan de humanidad y conmigo no tuvieron ninguna», dijo Lucrecia, la oficial herida en 2015.
Los hermanos Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci enfrentaron un nuevo juicio por balear a dos policías en Ranchos, tras la fuga del penal de General Alvear, en diciembre de 2015, en donde cumplían su condena por el triple crimen de General Rodríguez. Los hermanos recibieron una condena de 13 años de prisión, mientras que su cómplice, 7.
Este lunes por la mañana se desarrolló en el Tribunal Oral Criminal (TOC) 1 de La Plata, la audiencia del juicio abreviado por el delito de «tentativa de homicidio agravada», por balear a los oficiales de policía Lucrecia Yudati y Fernando Pengsawath, en la localidad de Ranchos.
El juicio abreviado, regulado en el Código de Procedimiento Penal de la provincia de Buenos Aires, está previsto para delitos con penas menores a 15 años de prisión o una pena no privativa de la libertad, y requiere del acuerdo del fiscal, el imputado y su abogado defensor. Es decir que comienza con la audiencia y finaliza con la condena, sin juicio oral y público.
En este caso, se preveía una pena de entre 10 y 13 años de prisión para los hermanos Lanatta y de entre 7 y 8 para Schillaci, por no haber disparado. Este lunes se formalizó el acuerdo entre la defensa y la fiscalía, a cargo de Silvina Langone.
«Estoy conforme con la decisión. Me daba mucha bronca verlos. Hablan de humanidad y conmigo no tuvieron ninguna», dijo Lucrecia, la policía baleada, tras la audiencia. «Con 55 operaciones, a la fecha sigo con el pie que empecé de nuevo una rehabilitación, tratando de llevarla lo mejor posible. Sabía que iba a llegar este momento. Jamás me voy a olvidar, pero quiero saber que se hizo justicia. Me quedó una incapacidad en el pie izquierdo y no pude continuar con la carrera de policía. Sólo quería justicia», expresó.
Por su parte, Martín Lanatta insistió sobre su inocencia en este hecho. «Solicitamos la unificación de las penas. Nosotros no tuvimos participación en le hecho, esta es una cuestión técnica. Un juicio oral nos demoraría unos meses y por cuestión técnica nos sirve para seguir con la progresividad de la pena. La justicia es muy técnica, un juicio abreviado no habla de culpabilidad. Jamás pasamos por Ranchos», aseguró a la prensa. «Hemos enfrentado todos los juicios diciendo la verdad«, agregó.
La triple fuga
Los hermanos Lanatta y Schillaci, condenados a perpetua por el triple crimen de General Rodríguez, cumplían su pena en el sector Sanidad de la Unidad Penitenciaria 30, cuando consiguieron escaparse la madrugada del 27 de diciembre de 2015.
El trío aprovechó el momento en que ingresó un guardia para hacer el recuento habitual. Lo golpearon, lo ataron de pies y manos, lo amordazaron y le robaron las llaves de un Fiat 128, en el que escaparon del penal. En la calle los esperaba una 4×4 y con la ayuda de terceros, dieron inicio a la triple fuga. Fueron 13 días de locura hasta que cayeron en la provincia de Santa Fe, en enero de 2016.
Así fue el tiroteo con los policías
En diciembre de 2015, los ahora condenados atacaron a balazos a dos policías en un control vial de la ciudad bonaerense de Ranchos y el momento quedó registrado en imágenes obtenidas de una cámara de seguridad del puesto.