Después de meses de investigación, la Justicia detuvo hasta ahora a cinco exfuncionarios kirchneristas y a una media docena de empresarios en el marco de una causa que podría convertirse en un Lava Jato argentino. Varios de los laderos más cercanos de Néstor Kirchner y de Julio De Vido durante todos los años que duró la gestión kirchnerista quedaron a disposición de la Justicia acusados de ser parte de una asociación ilícita que se dedicó, al menos durante 10 años, a recorrer Buenos Aires en busca de bolsos llenos de dinero que entregaban los contratistas de la obra pública.
La expresidenta Cristina Kirchner fue llamada a indagatoria para el 13 de agosto junto con otros exfuncionarios como José María Olasagasti (secretario privado de De Vido),Oscar Parrilli y Juan Manuel Abal Medina, además de empresarios, como Rudy Ulloa Igor y Juan Lascurain.
A las 4.30, varios móviles policiales llegaron al domicilio de Roberto Baratta en pleno barrio de Belgrano. Mientras tanto, una ola de detenciones y allanamientos empezó en la ciudad. Prácticamente todos los colaboradores cercanos del exministro de Planificación Federal quedaron a disposición de la Justicia.