Con la reaparición pública de la vicepresidenta y el apoyo de todos los gobernadores, el ministro de Economía comunicó el plan de reestructuración de la deuda.
La Quinta de Olivos fue el escenario en el que Martín Guzmán presentó el plan de reestructuración de la deuda con el Fondo Monetario Internacional, y donde se gestó una «foto» que encierra el apoyo total de esta propuesta. En ella aparecen los líderes políticos del momento, tanto oficialistas como de la oposición.
Junto a Guzmán, en la cabecera de la mesa de la reunión estuvieron el presidente Alberto Fernández, la vicepresidenta Cristina Kirchner, el presidente de la Cámara de Diputados Sergio Massa y Horacio Rodríguez Larreta, jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Esto marcó la unión entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio, motivo por el que el Presidente agradeció especialmente al «jefe de Gobierno porteño, al gobernador de Jujuy, de Corrientes, de Mendoza», en referencia a Rodríguez Larreta (uno de los pocos que usaba el tapabocas recomendado), Gerardo Morales, Gustavo Valdés y Rodolfo Suárez, respectivamente.
Y también habló de «los nuestros, por acompañarnos siempre», en alusión a los mandatarios provinciales peronistas que están alineados. Algunos estaban presentes y muchos otros siguieron las alternativas del encuentro por teleconferencia.
«Hoy estamos dando un paso muy importante para la Argentina», subrayó el jefe de Estado. A su derecha estaba sentada Cristina, que prácticamente no habló ni hizo gestos, mostrándose muy seria.
Esta fue la primera aparición pública de la vicepresidenta tras su último viaje a Cuba (del que regresó con su hija Florencia) y desde que comenzó la crisis por el coronavirus, de la que aún no ha hecho mención.