Al momento de la partida, Comodoro Rivadavia padecía fuertes ráfagas de viento, hecho que dificultó la salida del buque y puede demorar la llegada a su destino.
La colocación del minisubmarino en la plataforma del buque de bandera noruega duró 12 minutos y se logró realizar a pesar de que soplaban vientos de hasta 90 kilómetros por hora, informaron fuentes de la oficina de Operaciones del puerto de Comodoro Rivadavia.
Previamente se realizaron todas las pruebas necesarias para garantizar el funcionamiento óptimo del brazo hidráulico que hará descender al minisubmarino al agua en alta mar, indicaron.
Pese al tiempo transcurrido desde el último contacto con las autoridades en el continente, el vocero de la Armada, Enrique Balbi, subrayó que eso «no quita que puedan estar en un grado de supervivencia extrema«.
En tanto, la Armada ratificó que siguen «abocados a la fase de búsqueda y rescate del submarino» y manifestaron que todavía hay esperanzas de que los 44 tripulantes estén vivos. «Nosotros tratamos de ser respetuosos y si bien van 11 días de búsqueda no quita que puedan estar en un grado de supervivencia extrema», manifestó el vocero.
En el Edificio Libertad, el portavoz a cargo de brindar los partes oficiales indicó que «las condiciones climáticas en la búsqueda del submarino son adversas». Asimismo, Balbi precisó que el buque Sophie Siem «tardará un día en llegar a la zona de búsqueda» y remarcó que pese a haber transcurrido once días del último contacto del ARA San Juan «no hay ningún tiempo definido para abandonar la búsqueda«.