Un vecino de La Plata intentó ingresar a Chivilcoy para despedirse de su papá, luego de que su médico lo llamara para informarle que estaba agonizando. Al llegar a la ciudad y pese a tener permiso, desde el control no lo dejaron pasar y tuvo que regresar a la capital provincial. Enterado de la situación, el Intendente Britos repudió el hecho y lo llamó para garantizarle el ingreso. El hombre emprendió nuevamente el viaje pero en medio de la ruta lo llamaron avisándole que su papá había muerto.
Un vecino de La Plata intentó en las últimas horas ingresar a la ciudad de Chivilcoy para despedirse de su papá, que padece de Alzheimer, luego de que el médico de la familia lo llamara para informarle que a su padre no le quedan «muchos días de vida». Sin embargo al llegar a la ciudad, desde el control de ingreso le negaron el ingreso.
Claudio Parente contaba con todos los permisos necesarios para circular y demás está decir que su visita estaba justificada. Sin embargo, la respuesta por parte de los efectivos fue negativa y tuvo que volverse a La Plata. Tampoco pudo ver a su madre, una adulta mayor quien permane sola en su casa durante la cuarentena.
Enterado del episodio, el Intendente de Chivilcoy, Guillermo Britos, repudió el hecho y calificó como un «grave error» la conducta del personal policial que impidió el ingreso, extralimitándose en su decisión. En ese sentido, decidió llamar personalmente a Parente para garantizarle que tendría la ruta despejada y el acceso a la ciudad garantizado.
«Después de hablar con el Intendente de Chivilcoy junté mis cosas y partí a ver a mi viejo», contó Parente. Promediaban las 8.30 de la mañana cuando su teléfono celular comenzó a sonar. Debido a la baja señal, el auto debió frenar su marcha y estacionar al costado del camino. Y fue en ese marco, en medio de la ruta, que se enteró que su papá había muerto.
«Quedó un abrazo y un beso pendiente. Tengo mucho dolor, mucha bronca y una profunda tristeza por lo que me hicieron. Es un dolor con el que voy a tener que vivir toda mi vida. Mi papá estaba muy mal y yo sabía que tenía las horas contadas», relató Claudio entre sollozos al diario local El Día. La triste noticia conmueve a toda la capital provincial.
Claudio Parente se sumó a la lista de tantos argentinos que padecieron no poder ingresar a una ciudad, aún con causas justificadas y los permisos correspondientes. El caso que generó mayor conmoción en la sociedad fue el de Solange Musse, la joven de 35 años que sufría un cáncer terminal y murió en Córdoba sin poder ver a su papá.