Miguel Pastorini, referente seccional de la Asociación Bancaria, habló con ABC Saladillo sobre lo que involucra al gremio en esta reestructuración por emergencia sanitaria y cuarentena obligatoria. “Debemos volver al viejo sistema, donde todos los bancos tenían asignados un mínimo de jubilaciones y pensiones para atender, y de esa forma no se concentraría todo en unos pocos bancos”, asegura el banquero.
A propósito de la reorganización de la actividad bancaria, Miguel asegura que “desde la declaración de la emergencia sanitaria, los bancos hemos trabajado constantemente con gran porcentaje de trabajadores manteniendo todo el sistema informático, de la carga de cajeros, distribución de numerarios”.
“Sólo se fue intensificando y agregando compañeros y compañeras a la actividad, pero siempre –incluso feriados- un gran porcentual de la dotación estuvo afectado a mantener el sistema de conectividad vivo, para que todas las operaciones pudieran realizarse por los homebankings de los distintos bancos, la carga de cajeros automáticos, distribución de dinero, prestando atención que no se caiga”, agregó.
En este sentido, el gremio estableció “un protocolo que intentamos imponer a las cámaras empresarias, lamentablemente con distinta aceptación. Los que mejor están llevándolo adelante son los bancos oficiales, donde sí se está protegiendo al usuario y al trabajador. A nosotros, como gremio, nos preocupan las dos puntas del problema: el usuario y el trabajador”.
“Los banqueros actúan en función de sus intereses: si fueran por los banqueros, lo que se privilegia es el negocio, las tasas altas de interés para cobrarle a los usuarios y no les interesa mucho la salud de sus trabajadores, salvo la banca oficial y algunos bancos pequeños que se dedican, fundamentalmente, a jubilados; el resto, está esperando y sigue haciendo negocios”, disparó además Pastorini.
Acerca de los adultos mayores, el delegado asegura que “una de las formas de protegerlos es tratar de realizar todas las operaciones por los mecanismos electrónicos que brinda el sistema financiero. Hay trabas culturales, físicas e intelectuales que hacen que a un grupo pequeño, fundamente los adultos mayores, no les resulte ni fácil ni cómodo estos mecanismos; el segmento que desecha, fundamentalmente, la banca privada que se dedica al negocio concentrado. Y es uno de los problemas que tenemos que resolver”.
“Entre las propuestas que precisamente plantea La Bancaria es la distribución de pagos en todos los bancos en forma equitativa. Si yo tengo una capacidad operativa en el Banco Santander, por así decirlo, que prefiere tener una clientela y no le da ‘estatus’ a atender a los jubilados… Esto se acabó. Debemos volver al viejo sistema, donde todos los bancos tenían asignados un mínimo de jubilaciones y pensiones para atender, y de esa forma no se concentraría todo en unos pocos bancos”, explicó Pastorini.
Miguel, además, destacó: “La segunda parte del problema que hoy impacta a los bancos es que tienen el dinero suficiente para prestar en una tasa baja, pero siguen insistiendo en una tasa alta, y desechan la posibilidad de darle créditos a las PyMEs para poder sobrellevar este momento. El Gobierno impulsa la idea de desobligar a los bancos a tener dinero inmovilizado en el BRCA, les permite tenerlo en sus propias entidades, con la razón que sea un elemento prestable a las PyMEs que hoy necesitan pagar sueldos, comprar insumos, y poner el sistema productivo en marcha cuando esto sea posible”.
En resumen, lo que resalta la Bancaria es que “si no se reparte el esfuerzo entre todos los bancos, y algunos quieren hacer sólo lo que da rentabilidad, dejándole al resto la carga social, estaríamos frente a una sociedad que sigue permitiendo la injusticia”.
Por último, Miguel dio una serie de recomendaciones: “La circulación monetaria también impone un riesgo, porque el billete es transmisor. También las tarjetas de débito o crédito, pero en un billete el riesgo es mucho mayor. La idea de bancarización generalizada, que hoy cualquier banco te la ofrece, es para hacer todo tipo de operación y transferencia, transferencia al exterior, compra de monedas en los límites del Estado, depositar cheques y cobrar a través de ATM, sacar un préstamo personal, hay sistemas nuevos como Punto Efectivo…”.
“Mantener distancia social, tratar de evitar hacer colas, tratar de ayudar al vecino o amigo a usar procedimientos bancarios. El resto será a cuenta de nosotros, quienes debemos continuar dándole servicio de calidad”, agregó.
Si bien Pastorini asegura que “no hubo ningún tipo de negociación entre los bancarios y cámaras empresarias, con organismos del Estado ya sea BCRA, ANSES o el Poder Ejecutivo; sí ha habido conversaciones”, en las cuales se emitieron las siguientes recomendaciones:
“Mantener las recomendaciones que da el Ministerio de Salud, atender todas las determinaciones del área de salud, estar sujetos a esas normas, proponer el mantenimiento a rajatabla de la distancia social tanto dentro como fuera del lugar de trabajo; tratar que se coloquen mamparas no sólo en las cajas sino en todos lados; mantener el aseo de los lugares de trabajo; y continuar desarrollando la tarea para que este servicio se regule, porque no estamos en una situación normal, sino en una crisis de una pandemia”.
