Walter Abarca, diputado provincial del Frente de Todos y presidente de la comisión de Obras Públicas de la legislatura, habló con ABC Saladillo sobre el acompañamiento de la provincia y ‘el día después de la pandemia’. Abarca brindó detalles del plan de obra pública a 20 años que tiene previsto comenzar el gobernador Axel Kicillof apenas se puedan volcar los esfuerzos a reactivar la economía.
En principio, a propósito de la pandemia que nos azota, Abarca se mostró optimista: “Tengo la expectativa de que, por agosto o septiembre cuando empiece a hacer calorcito, estemos liberados de este virus. Pero la verdad es incierto, día a día hay que ir viendo la situación y analizando los números, viendo cómo se continúa”.
Luego, fue consultado por las diferencias políticas entre los sectores: “En los momentos de crisis es donde se ve la clase de dirigentes políticos. En esto es fundamental, y yo siempre lo destaco, que quienes tienen el poder de decisión tengan la cabeza fría y estén tranquilos. Destaco lo de Alberto Fernández, lo de Axel Kicillof y lo de José Luis Salomón. A quienes nos toca ser oposición, por ejemplo en el orden local, la función creo que es no perturbar, ayudar y colaborar, tratar de que quien tenga que tomar decisiones tenga la cabeza fría”.
En ese sentido, agregó: “Siempre hay diferencias, discusiones. Yo siempre trato de llamar a la cordura, son momentos en los que la gente quiere vernos a los dirigentes políticos trabajando en conjunto para solucionarles su único problema que es el tema de salud. Desviarse de ese camino es equivocarse en lo que la gente pretende de los políticos”.
Con respecto al acompañamiento que se les brindó a los Municipios, Abarca contó que Saladillo ha recibido los recursos necesarios para cubrir la masa salarial: “La provincia ha acompañado con recursión que envió Nación. Es un poco menos que lo que hubiesen recibido por co-participación, pero la realidad es que los 135 intendentes no podrían pagar salarios si no fuera por el aporte de la provincia”.
LA SITUACIÓN ECONÓMICA DE LA PROVINCIA
“La provincia estaba incendiada antes de la pandemia, imagínate cómo sigue ese incendio”, comenzó Abarca, quien en ese sentido agregó: “Cayó la recaudación un 40 y 50% y tiene una deuda pendiente de $200.000 millones de pesos con un dólar a $30 y pico: no quiero exagerar, pero debemos estar cerca de los $300.000 millones. Esto está en un proceso de negociación. Es una deuda acuciante, son tres o cuatro presupuestos de Salud y 50% menos de recursos por la pandemia”.
Adentrándose en lo que ocurrirá con la deuda, Abarca expresó: “Cuando salgamos de esta situación, tendremos que terminar de resolver la deuda. Claramente no vamos a poder pagarla, porque la provincia está en un default virtual, y con la situación de salud que tenemos hoy en la provincia no se puede destinar un solo peso de salud para el pago de la deuda”.
“Me pregunto cuál será la deuda de los países del mundo después de una pandemia que azotó a los países de todo el mundo. Como mínimo, va a haber una renegociación para todos los países en desarrollo a nivel mundial, y allí Argentina tendrá que hacer lo que en su momento hizo Néstor Kirchner: renegociar la deuda, decir: ‘hasta acá podemos pagar’; fomentar el mercado interno y un plan de obra pública que active la economía; y después ese mismo crecimiento tendrá que financiar el desarrollo de la provincia”.
“Tuvimos una reunión con el ministro de Obra Pública y ya se empieza a hablar de un plan de obra que reactive la economía. Esto, sin lugar a dudas, se va a hacer con recursos de Nación”, agregó.
UNA ESPECIE DE ‘PLAN QUINQUENAL’ PARA REACTIVAR LA ECONOMÍA
Abarca brindó detalles del ‘día después de la pandemia’, comparándolo con proceso de planificación estatal que caracterizó al primer gobierno de Juan Domingo Perón. Contó que la comisión que él presiden, de Obras Públicas, tuvo una reunión virtual de más de tres horas con el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos bonaerenses, Agustín Simone: “Habló de la situación que atraviesa la provincia, de algunas obras pendientes de la gestión de María Eugenia Vidal -de todo lo que tiene pendiente la gestión Vidal- y una especie de ‘Plan Quinquenal’, un plan de desarrollo para la provincia de Buenos Aires de 20 años”.
“Se habló de energía, tarifas, de empresas del Estado –como ABSA-; de las rutas –estado, mantenimiento y rutas nuevas-, se habló de aguas, de desarrollo de agua potable. También de cuestiones estratégicas de la provincia de Buenos Aires, y en el marco de eso se está pensando un plan de obra pública que nosotros lo llamamos ‘Quinquenal’, por el gen peronista. Kicillof intentará, en cuatro años que tiene como gobernador, hacer la mayor cantidad de obras posibles. Pero que esas obras estén enmarcadas en un plan de desarrollo para la provincia de Buenos Aires”, agregó Abarca.
Con respecto a la financiación, Walter respondió: “Hay varias obras a terminar, por ejemplo la del Salado, que es un crédito otorgado por el Banco Mundial y no tuvo difusión. En el año 2019 se ejecutó menos el 50% de la obra pública en la provincia. Para el resto, creo que tendrá que haber algún financiamiento de Nación. También Nación tendrá que rediscutir la deuda, refinanciarla y darle sustentabilidad”.
