El mandatario provincial repasó los récords de contagios de covid-19 en los últimos días: “Es impresionante la velocidad con que crecen” los casos positivos, dijo.
Tras el anuncio del presidente Alberto Fernández sobre las nuevas medidas de cuidado frente al coronavirus, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, explica cómo se implementarán las restricciones para tratar de frenar la segunda ola de la pandemia en el mayor distrito del país.
“Prefiero ampliar y construir hospitales que ampliar cementerios”, sentenció el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, al anunciar las medidas preventivas que tomará la Provincia en consonancia con las disposiciones del gobierno nacional para enfrentar la segunda ola de la pandemia de coronavirus. “La situación cambió violenta y súbitamente”, reconoció.
“No es una ola lo que está pasando, me animo a decir que es un tsunami”, alertó el mandatario provincial durante una conferencia en la que repasó los récords de contagios de covid-19 en los últimos días. “Es impresionante la velocidad con que crecen” los casos positivos, dijo.
Kicillof analizó que “seguramente, el hecho de que en los últimos meses hayamos relajado algunas conductas (…) contribuyó” al aumento de casos y confirmó el hallazgo de “cepas más peligrosas y más contagiosas” en todo el territorio provincial.
Por esta situación, advirtió, “el logro de que no haya faltado atención sanitaria (por los refuerzos que recibió el sistema sanitario) está en peligro”.
“Hay que parar los contagios, porque más contagios son más internaciones y más muertos, y corremos el riesgo de que se sature el sistema sanitario, no solo en la provincia”, subrayó.
“Sé que algunos piensan, dicen, sostienen y propagandizan que todo salió mal. Pero hemos pasado este año construyendo y ampliando nuestras terapias, hospitales, centros de testeos y vacunatorios. Prefiero ampliar y construir hospitales que ampliar cementerios”, afirmó y destacó el rol del presidente Alberto Fernández, que “tomó en cada momento las medidas que tenía que tomar, priorizando la salud”.
“Nadie esperaba que durara todo lo que está durando. Fue un año no solo difícil y grave para la salud sino también en que se vivieron privaciones de todo tipo”, reconoció el mandatario provincial sobre la pandemia, al tiempo que dijo comprender “todas las angustias, los problemas y los reclamos” de la población.
Además, cuestionó los argumentos de la oposición que rechaza todo tipo de restricciones con argumentos insólitos. “Acá no está en juego la abstracta libertad individual de hacer lo que queremos sino que hay una grave crisis en la que juegan los derechos. ¿Quién tiene derecho a no cuidarse y contagiar a otro?”, preguntó.
Destacó que “prácticamente todos los trabajadores de salud están vacunados” y se refirió a la grave situación que atraviesan los centros sanitarios. En los hospitales “se lucha una guerra contra el coronavirus”, tanto “desde los pacientes como de parte de los trabajadores de la salud”.
“No podemos descuidarnos ahora ni dejar que se desborde el sistema sanitario”, dijo y enumeró las medidas que se aplicarán en todo el territorio bonaerense. “Vamos a aplicar el criterio de siempre: crecen los casos y se aplican restricciones”.
Las medidas que anunció el Presidente se van a acatar «al pie de la letra» y vamos a adecuarlas” a la realidad provincial. Por ejemplo, para los municipios en fase 5, la restricción horaria va a ir de las 2 a las 6 de la mañana; para los que están en fase 4 habrá una restricción total entre las 0 y 6.
En tanto para los que están en fase 3 habrá un cierre de locales de gastronomía desde las 23, una prohibición de circular a partir de la medianoche y un cierre de comercios en general desde las 20 hasta las 6 de la mañana.
Kicillof anticipó que “habrá severas multas” para quienes no cumplen con estas medidas y también se activará un paquete de ayuda para las empresas más golpeadas por estas medidas. De la misma manera, dijo que habrá una “moratoria para los sectores que más sufren”.
“Esta es una carrera entre el virus y la vacuna”, dijo Kicillof e insistió que “va a ser mucho más sencillo abordar la segunda ola” mientras haya una importante cantidad de personas inmunizadas.
De la misma manera, cuestionó a quienes utilizan la pandemia para “sacar un provecho” político y poner en tela de juicio las políticas sanitarias del último año. “Dejaron un sistema destruido”, cuestionó.
“Estamos en un momento sumamente delicado y no podemos mentir ni ir con cifras engañosas y menos abocarnos a la campaña electoral. Este gobierno no está en campaña electoral sino en campaña de vacunación. Intentamos no agredir ni estar confrontando sino a cuidar, proteger y vacunar, vacunar y vacunar”, agregó
Kicillof puntualizó que “los trabajadores de la salud están dejando todo para cuidarnos” y agradeció a la población “por el inmenso esfuerzo que hace”. “Durante un tiempo, si todo sale bien, vamos a recordar esta etapa no por las mezquindades ni los egoísmos sino por la solidaridad de nuestro pueblo”, concluyó.