Fanáticos de distintas partes del país de Harley-Davidson, la marca emblemática de motos estadounidense, se dieron cita en Mar del Plata y este sábado al mediodía, antes de comenzar su caravana hacia varios puntos de la ciudad balnearia, expusieron sus joyas de dos ruedas en la puerta del Gran Hotel Provincial.
Los que pasaron por el boulevard marítimo Peralta Ramos y los vieron no pudieron evitar detenerse a mirar y la mayoría tuvo la necesidad de sacarse una foto. Unas 20 motos colocadas una junto a la otra, decoraban el ingreso del emblemático hotel en el marco del tercer encuentro que realizan en la ciudad y que tiene mística propia.
Motos de toda clase, todas Harley, decoraron la fachada del Gran Hotel Provincial
«Es el tercer año que hacemos el reencuentro de Mar del Plata que nos había quedado discontinuo, estamos ahora yendo todos a comer un asado a las sierras», le contó Javier a Infobae, parte del grupo, que sumó: «hay motos de todos lados, de Tucumán, Santiago del Estero, San Juan, Mendoza, Buenos Aires, todos lados».
No fueron pocos los que se pararon a llevarse un recuerdo
«La Harley es una moto retro, es algo distinto, que no dobla, no frena, no acelera, pero es una tradición», resumió sobre un fanatismo que no tiene nada que ver con capacidades técnicas, sino con una filosofía, una experiencia en dos ruedas.
Desde distintos puntos del país los fanáticos viajaron para participar de este tercer encuentro en La Feliz
«Es adrenalina pura cuando te subís y escuchás el sonido, además son todas distintas, son como cuadros, obras de arte, todas distintas», siguió intentando poner en palabras Javier mientras miraba la fila de motos, unas de colores, otras oscuras, cada una con un detalle que la hacía única, todas Harley Davidson.
La gira de los fanáticos seguirá por Bariloche, entre otras ciudades argentinas, para después ir a Paraguay y Chile
Daniel, con su moto enfrente, se sumó a la charla y también quiso dar su definición del sentimiento. «A nosotros lo que más nos interesa es estar juntos, uno cuando compra una Harley no compra un vehículo de transporte, compra un estilo de vida y nos gusta compartir esa pasión», resumió.
Daniel: “Uno cuando compra una Harley no compra un vehículo de transporte, compra un estilo de vida “
Sobre las convocatorias explicaron que son grupos dispersos los que se van encontrando en distintas ciudades y adelantaron que la gira sigue ahora por: Bariloche, Mendoza, Villa María, Carlos Paz, Junín, Paraguay y Chile.
Javier: “Son todas distintas, son como cuadros, obras de arte”
En relación a qué se siente manejar una Harley en grupo por Mar del Plata, Javier se ríe y define: «Te miran todos, te da vergüencita».
