La Santa Sede había firmado un histórico acuerdo para la integración de la Iglesia católica, pero ahora alerta de que el Gobierno chino no está cumpliendo algunos aspectos
Durante las primeras horas de este martes, y en el marco de un encuentro del Papa Francisco (84) con jesuitas de Eslovaquia, éste acusó a su entorno en el Vaticano de que «algunos me querían muerto».
Ante la pregunta de un jesuita a Sumo Pontífice sobre cómo está, éste le respondió: «Vivo, todavía, aunque algunos me querían muerto. Sé que hubo incluso hubo encuentros entre prelados, que pensaban que el Papa estaba más grave de lo que se dijo. Preparaban el cónclave», criticó Jorge Bergoglio.
«Gracias a Dios, estoy bien. La operación fue una decisión que no quería tomar. Fue un enfermero el que me convenció. A veces, los enfermeros entienden mejor la situación que los médicos porque están en contacto con la gente», agregó Francisco, quien fue intervenido quirúrgicamente el 4 de julio en el hospital Gemelli de Roma, donde estuvo luego 10 días internado