La torre Eiffel fue cerrada a los visitantes como consecuencia de las malas condiciones climáticas, según anunció la entidad que gestiona el monumento más emblemático de París. Esta medida se debe a que la capital francesa y sus alrededores están en alerta por nieve y hielo.
“Debido a las condiciones meteorológicas, la torre Eiffel está cerrada para todos nuestros visitantes”, señaló la empresa en Twitter, invitando a los interesados a seguir “la evolución de la situación” en las redes sociales.
La determinación en la torre Eiffel, que recibió más de seis millones de visitantes en 2017, es apenas la punta del iceberg de una serie de medidas de precaución dispuestas en el norte de Francia. Las temperaturas glaciales hicieron que 32 departamentos activaran planes de contingencia.
En este primer episodio de frío extremo y nieves intensas en la temporada invernal, después de un mes de enero excepcionalmente suave, provocó sobre todo perturbaciones en el transporte público.
Los trenes recibieron órdenes de reducir la velocidad y generaron demoras, en tanto los camiones pesados recibieron órdenes de no circular en algunas rutas y caminos. Las autoridades también pidieron a los automovilistas particulares que limitaran sus desplazamientos.
En tanto, el brusco descenso de la temperatura también tomó por sorpresa a España.