La lucha por la defensa del título llegó a su fin este miércoles para Kevin Benavides. Es que, el motor de su moto 450 Rally Factory falló y dejó al argentino afuera de todo. El salteño debió abandonar la competencia en la décima etapa del Rally Dakar, que se lleva a cabo en Arabia Saudita.
Benavides, campeón en 2021, habló ante los medios oficiales de la carrera tras su abandono y se mostró muy compungido: “Sinceramente no sé, estaba pilotando muy bien y entonces el motor falló, pasó algo en el interior”, dijo el piloto entre lágrimas. “Me siento en la mierda, lo siento por decirlo así, pero es realmente muy triste. Ya sabes, apretamos todos los días, tratamos de volver a la parte delantera, de luchar. También quería defender mi número 1″.
Además, agradeció a todos los que lo que estuvieron con él y expresó que tendrá revancha: “Muchas gracias a todos los que siempre han apoyado y han estado ahí. Tendremos que volver nuevamente, como siempre. Sin rendirnos nunca”.
El piloto de Salta se preparó de otra manera para este año. Había cambiado de montura después de su épica victoria el pasado enero, dejando atrás Honda para recalar en KTM. La marca austriaca apostaba así a caballo ganador en su intento por recuperar el trono del Dakar, para lo que también han contado con el cinco veces ganador del rally Marc Coma, en el rol de asesor deportivo.
En el km 133 de la décima especial del Dakar 2022, donde partía segundo, el motor de la 450 Rally Factory de Benavides dijo “basta” y dejó al argentino sin opciones para las dos ultimas jornadas que se disputarán el jueves y el viernes para cerrar esta edición del rally. Hasta ese punto, Benavides venía gestionando de manera sensacional el día, dejándose solo 47 segundos con Joan Barreda en el parcial km 128. De este modo, KTM se queda así sin otra bala, después del abandono de Daniel Sanders (GasGas) en la séptima etapa.
Otro abandono
Una situación idéntica padeció el cordobés nacionalizado estadounidense Pablo Copetti, que venía segundo en la clasificación general de cuatriciclos, detrás del francés Alexandre Giroud. Copetti, quien se había impuesto en la novena etapa y había recortado cinco minutos la diferencia que le llevaba el líder para situarse a poco más de 24m, sintió el ruido a roto del motor de la unidad Yamaha. Al momento del abandono, el nacionalizado norteamericano, de 46 años, marchaba segundo en la etapa, detrás de Giroud, a 25 segundos.
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LA NACION