Intendentes y dirigentes rurales lo solicitaron ante el gobierno provincial por la sequía y las heladas que afectaron al trigo, la arveja y la cebada.
Por la sequía y las heladas que afectaron los cultivo en las últimas semanas, los productores bonaerenses afectados quedarían exentos del pago del Impuesto Inmobiliario Rural y el Banco de la Provincia de Buenos Aires les daría facilidades crediticias, si prosperan las gestiones que realizaron trece municipios, a través de intendentes y dirigentes rurales. Pidieron ante funcionarios del Gobierno de Axel Kicillof que se declare la emergencia y desastre agropecuario, como consecuencia de los fenómenos climáticos que afectaron al trigo, la arveja y la cebada.
En la reunión convocada por la Comisión de Emergencia y Desastre agropecuario se presentaron datos sobre las pérdidas en los cultivos de invierno, ocasionadas por la extensa sequía, que superan el 50% del rendimiento, mientras que en el caso puntual de las legumbres y algunos lotes de trigo, cebada y avena, las pérdidas están por encima del 90%. Con esta información, suministrada por productores, ingenieros y el INTA, se pidió la declaración de emergencia y desastre agropecuario por un período de 6 meses.
El Ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez, participó de la reunión de la Comisión de Emergencia y Desastre Agropecuario de la Provincia de Buenos Aires (CEDABA), en la que se decidió recomendar la declaración del Estado de Emergencia y/o Desastre Agropecuario por sequía para los partidos de San Pedro, San Vicente, Chascomús, Dolores, Magdalena, Rojas, Salto, Alberti, Ramallo, Lobos, Junín, Suipacha y Arrecifes.
“Se analizaron todos las solicitudes y los relevamientos que ya veníamos haciendo respecto de las condiciones climáticas de los últimos meses. Está claro que este fue un ciclo especial, donde los niveles de precipitaciones se redujeron en muchos lugares y eso afectó a los cultivos de invierno y a la producción ganadera”, explicó el ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez.
También se propuso mantener diálogo constante con las Comisiones Locales y convocar una próxima reunión de CEDABA el próximo 14 de noviembre.
Además del ministro Javier Rodríguez, del encuentro participaron el subsecretario de Desarrollo Agrario y Calidad Agroalimentaria del MDA, Cristian Amarilla, y el director de Sustentabilidad y Medio Ambiente, Raúl Villaverde, junto a su equipo de trabajo; funcionarios del Ministerio de Hacienda y Finanzas bonaerense, de ARBA, del Bapro, y representantes de las entidades rurales que conforman la Comisión (CONINAGRO, SRA, CARBAP, FAA, FEBAPRI y Agricultura Familiar).
Horacio Salaverri, presidente de Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) describió el escenario climático como “sequía extrema”. A la falta de agua que se padeció en algunas zonas productivas, sin lluvias durante cuatro meses, se le suman las bajas temperaturas de esta semana. “Vino un clima desértico”, explicó. Este fenómeno abarca a las provincia de Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos.
La responsable de la Oficina de Monitorea de Emergencias y Desastres Agropecuarios de la Nación, María de Estrada, informó que “el déficit hídrico afectó a unas 140 millones de hectáreas, 7 de las cuales están en condición de sequía severa”.
Falta alimento para la ganadería en el momento de las pariciones
En tanto, para la producción vacuna los problemas de la sequía se expresan en la falta de forrajes, tanto verdeos y pasturas como así también en la merma que se puede registrar en la producción de maíz y otros granos que se utilizan como alimento de los animales en los feedlots y en los tambos.
El agravante es que esta situación se da en momentos clave de las actividades, que es cuando hay parición de las vacas y comienza la cría de terneros.