Al llevarla al hospital, la madre dijo que la víctima se había caído de la cama, pero la autopsia demostró que no había sufrido ningún accidente. Quedó detenida al igual que su pareja por homicidio.
La muerte de Milena fue aberrante. No fue víctima de un accidente, como le aseguró su mamá a los médicos al inventar que se había caído de la cama, sino que la habían matado a golpes. Por ello la mujer, Milagro Esther Torres, y su pareja, Darío Chamorro, fueron detenidos por homicidio. En el medio, quedó nuevamente bajo la lupa el accionar de la Justicia que hace tres meses le había devuelto la tenencia de la menor a la presunta asesina.
La beba tenía solo dos años y vivía en una casa de la localidad de Mariano Acosta, en Merlo, con su mamá, su hermanito de meses, su padrastro y el hijo de él. Tras descartar la coartada de los sospechosos a partir del resultado de la autopsia, el espanto sumó todavía más horror: los hermanos de la víctima también tenían signos de maltrato e incluso a uno tuvieron que tomarle los signos vitales porque creyeron que también estaba muerto.
El otro dato indignante que confirmó en las últimas horas una fuente cercana a la causa al portal local Primer Plano, fue que hace 90 días la justicia de Pilar le había quitado la tenencia de Milena a su padre biológico para dársela a Torres, a pesar de que en ese momento la mujer decía vivir en situación de calle.
Según los primeros datos surgidos en la investigación, Torres mantenía una disputa judicial con el padre biológico de Milena por la custodia de la nena. Hubo denuncias cruzados y restricciones perimetrales en el medio, pero hace tres meses le restituyeron la tenencia de la víctima a su mamá, quien está acusada de asesinarla a golpes días atrás.