
NO ES DE PACOTILLA!
Por Lis Solé
La existencia en los pueblos de las grandes tiendas como la “CASA MENDOZA”, demuestran una idiosincrasia y cultura de la primera década del 1900 donde la prioridad era la buena atención, la calidad y el precio de los productos.
“No es de pacotilla”. Así se promocionaba la tienda de Donato Mendoza, tienda que se encontraba en la actual esquina de Hipólito Irigoyen y San Martín de General Alvear, justo enfrente de la plaza principal, hace ya más de 100 años.
¡Y cuántas veces se escuchaba en boca de los vecinos españolísimos como don Pacho o José Palacios: “En este mundo de pacotilla ya no se puede vivir!”, un rezongo más que va al pelo con la actualidad.
El término tan popular se refería a las cosas que no tenían valor y aludía a las “pacas”, bolsa que llevaban los marineros con sus pocas pertenencias por supuesto, nada que valiera la pena. Era constante escuchar: “Es un cantante de pacotilla” o “Fulanito tiene muchos humos pero un trabajo de pacotilla”, o sea, un empleo muy mal remunerado y sin jerarquía. Casi nada.
En estas tiendas de gente de antes, con olor a madera y telas, la intención era lo contrario: defender la reputación de venta manteniendo la calidad y eso debía demostrarse en la atención diaria, ofreciendo un muestrario de productos que las mujeres usaban para confeccionar la ropa de toda la familia con ayuda de las infaltables máquinas de coser.
Siempre de saco, camisa, corbata y zapatos recién lustrados, los empleados y dueños mostraban una apariencia y pulcritud sin igual. Tanto en el pueblo como en el campo, los comerciantes vestían traje y sombrero, deferencia al hablar siempre de Ud., sin tutear y sin aproximación física al cliente que pudiera dar lugar a algún malentendido porque ante todo se priorizaba la formalidad y los buenos modales.
ATENCIÓN ESMERADA Y CALIDAD INSUPERABLE
El español Donato Mendoza[1] comenzó a trabajar como mercachifle, recorriendo los campos en un charré ofreciendo telas, botones, artículos de zapatería, tejidos, ropa blanca y hasta artículos de perfumería. Ya más establecido, por los años 20, pudo instalarse en la tradicional esquina de San Martín e Irigoyen antes de que se allí funcionara el hotel de Laborde, lugar de cita de la gente de campo cuando debía quedarse por más tiempo en el pueblo por mandados o enfermedad.
Donato había nacido el 7 de agosto de 1885 en Navarrete, provincia de Logroña y era hijo del carpintero don Elías Mendoza y López, domiciliados en Fuenmayor junto a su esposa, Tiburcia Grijalba Blasco, también originaria de Fuenmayor e hija de Rufino Grijalba y Brígida Blasco y Sierra[2].
La edificación aparece construida en 1933 destinada a negocio y casa de familia. Con una superficie total de 323 metros cuadrados que incluía un hall, cuatro habitaciones, una cocina, un baño y el local del negocio, el local con una ochava de 5.10 metros tenía un garaje sobre la antigua calle Alsina, hoy Hipólito Yrigoyen pero con un lote en el medio que pertenece actualmente a la familia Rossi[3].
Donato aclaraba: “Que al público no se le halaga con promesas y que por consiguiente, no depende de la reclame mejor o peor hecha, sino de vender mercaderías de calidad y no de pacotilla con una utilidad lo más reducida posible”.
Donato Mendoza[4] se había casado en Alvear con Rosa María[5], la hija de los italianos Juan Gruccio y Ana María Bairo y bautiza en la Parroquia “San José”, a su hijo Roberto Donato, el 7 de enero de 1923.
En los últimos años, la tienda “CASA MENDOZA” se promocionaba como “LA MODERNA” y su orgulloso dueño invitaba en el periódico “El Independiente”: “interpretando ampliamente este programa” –que no era de pacotilla precisamente-, “a visitar la casa para hallar un amplio surtido en TEJIDOS, MERCERÍA, CONFECCIONES PARA HOMBRES, SEÑORAS Y NIÑOS, ZAPATERÍA, PERFUMERÍA, ROPA BLANCA…” ¡Porque hasta discos y victrolas vendía!
En otra publicidad Donato Mendoza aseguraba: “…precios reducidos, el conjunto moderno y la calidad insuperable de las mercadería que ofrece” en “Tienda, Ropería, Ropa Blanca y Ajuares de Novias”.
Calidad. Algo que ahora no se valora ni aprecia en la creencia que no es necesario la permanencia en el tiempo; épocas donde la ropa duraba por años pasadas por toda la familia hasta que no le cabía más un remiendo. Sin embargo, prevalecía el orgullo del hacer en un país que de ninguna manera se consideraba “de pacotilla” sino un pueblo con propósitos serios.
Las fotos:
- Interior de la “Casa MENDOZA” de Donato Mendoza. De izquierda a derecha se observa a Carricarte, el dependiente impecable de traje y corbata; Donato Mendoza; Diego Illescas con corbatín detrás del mostrador; Toribio “Coqui” Gómez; Carlos Casquero y un Limongelli sin identificar (podría ser Enrique “Toto”, o Adalberto “Beto” Limongelli, padre de Marta y Susana). El joven de anteojos que está parado detrás del mostrador al lado de unas cajas es Juan Carlos Elías Mendoza, hijo de Donato. Circa 1930. “Donato y Rosa tuvieron dos hijos: Juan Carlos Elias, nacido el 26 de marzo de 1915, mi padre, y el inolvidable tío Roberto”.
Foto y Testimonio de María del Carmen Mendoza Umaran.
- Publicidad de “Casa Mendoza” del 29 de Julio de 1929. Periódico “El Independiente”. Se promociona la existencia de victrolas y discos VÏCTOR.
- “No pierda tiempo!… Dirija sus pasos a la grandiosa LIQUIDACIÓN que realiza la “Casa MENDOZA”. OTOÑO E INVIERNO- tenemos ya el surtido más completo que Vd. Pueda imaginarse para esta temporada. Invitámosles a hacernos una visita que le reportará tiempo su dinero. Tenemos la última creación en calzado para señoras, niños y hombres a precios increíbles. ASOMBRO le causarán nuestros precios. Elimine la duda. Surtido completo en “Victrolas” y discos VICTOR”.
- Donato Mendoza en un retrato de la Casa Roig de Bragado (de la familia de Gabriel, el esposo de Esther Umaran). Gabriel Roig y Donato Mendoza se habían hecho amigos cuando Gabriel fue trasladado a la Comisaría de Alvear. (Testimonio de María del Carmen Mendoza, CP, 2023).
- La CASA MENDOZA en 1938. La tienda original tenía los mismos vidrios repartidos de colores verde y azul sobre las dos ventanas. La puerta principal era también de hierro, angosta, de doble hoja de unos 2 metros de ancho, del mismo estilo de las que aún se ven en la casa. A los lados, tenía dos escaparates con cortinas blancas de algodón bordadas. Cuando en una época el local fue alquilado para venta de autos, el frente fue reemplazado por una amplia puerta que fue construida por “Cacho” Herrera. Las persianas siempre fueron de metal de enrollar.
- Casa que pertenecía a Donato Mendoza sobre calle San Martín. La casa se mantiene tal cual fue construida en 1933, con sus patios de mosaicos calcáreos con rejas divisorias, grandes puertas y ventanas con persianas de metal y frente con frisos estilo italiano. En uno de los patios, el cotidiano aljibe, es una reliquia. La casa tiene el frente típico de una casa chorizo: dos ventanas y una puerta de hierro con zaguán. Los alféizares de las ventanas y la entrada son de mármol, la carpintería de madera y las balaustradas, de hierro forjado.
- La casa tiene fecha de terminación en 1933, quizás fue construida antes. En el plano se observa la Parcela 5 que ya no pertenecía a Juan José Gruccio (1883) y allí, en la parcela de aproximadamente 13 X 10 metros, vivía el matrimonio Rossi.
[1] “Antes de la tienda mi abuelo supo tener una carnicería en un local que creo era de mi bisabuela , María Gruccio, que era propietaria de una gran parte de la manzana situada enfrente de la de abuelo Pastor. Cuando éramos chicas cruzábamos de la casa de abuelo Pastor a la casa de la bisabuela en un periquete y sin peligro. Tránsito escaso o inexistente”. Se refiere a Pastor Umaran, con domicilio en San Martín y Mitre. (María del Carmen Mendoza, CP, 2023).
[2] Según partida de nacimiento aportada por María del Carmen Mendoza.
[3] Ese lote chico, pertenecía a Don Silvano Ortiz, luego a Carmen Elena Tagliani de Wallace y actualmente a familia Rossi. Don Perico Rossi la adquirió en 1976, bajo Remate Particular después del fallecimiento, en 1975, de su esposa. En 1980, creo Familia Mendoza, vende toda esa propiedad, mencionada, a José Luis Brancatti. (Aportes de Pipo Rocha, Facebook, 16/06/2023)
[4] Donato Mendoza falleció el 1° de Octubre de 1936. Sus restos se encuentran en el cementerio de General ALvear junto a los de su hijo, Roberto Donato Mendoza fallecido el 13 de diciembre de 1963 y su nuera, Rosa María Gruccio de Mendoza fallecida el 14 de Junio de 1956.
[5] Rosa María Gruccio nació en General Alvear el 11 de febrero de 1888 y sus padrinos de bautismo fueron Juan Galace y Carmen Risso, italianos domiciliados en Tapalqué. Rosa María era hermana de Juan José Gruccio (1892); María Micaela (1895); María Dominga (1896); Dante Alfredo (1898); Aída (1900) y Carmen Gruccio Vairo (1901). Juan Carlos Elías (nacido el 26 de marzo de 1915) y Roberto Donato Mendoza Gruccio fueron sus hijos. Los hijos de ambos fueron los que vendieron la propiedad a José Luis Brancatti en 1979, actualmente propiedad de Delia Susana López.




