Aunque el Presupuesto 2021 no prevé la posibilidad de que el Estado reedite el pago de un nuevo Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, no descartó que el Estado implemente una vez más esa medida si la Argentina retorna en los próximos meses a un marco de mayores restricciones como consecuencia de un recrudecimiento de la pandemia.
“Creo que este año vale por 10 para todos, para la vida cotidiana”, afirmó Arroyo en diálogo con radio Rivadavia, para luego hacer un balance de los momentos más críticos del último año: “Con la salud estuvimos muy complicados.
Tengo muy presente un caso de un barrio al que fuimos y no había ningún caso de coronavirus. A la semana había 5. Y una semana después, 160. Los contagios se disparaban”.
“Hay mucha gente que perdió ingresos, mucha gente angustiada. En la primera etapa estaban los centros de aislamiento y yo veía gente con tanto dolor, con la cabeza gacha, desesperada. Yo estuve en muchos centros de evacuados cuando hay inundaciones y me hacía recordar a eso. La verdad es que fue un año muy duro”, recordó.
La respuesta del Estado
Más allá de la complejidad del contexto, Arroyo valoró la respuesta para contener las necesidades: “Estuvimos todos a la altura: el Estado, la Iglesia, las organizaciones sociales, las escuelas, las empresas ayudando, pero fue un año muy duro”.
Luego, analizó el panorama actual y afirmó que desde hace cinco semanas se percibe una mejora. “Veo que va bajando un poquito la cantidad de gente en comedores. Va bajando de a poquito, básicamente, porque hay más changas de construcción y textil, hay más movimiento”, aseguró.
¿La vuelta del IFE?
Por otro lado, en relación con la posibilidad de que el Gobierno vuelva a desembolsar el bono de $10.000 que tuvo como destinatarios a alrededor de 9 millones de personas en cada una de sus tres emisiones, el ministro resaltó que las proyecciones de gastos del 2021 no prevén esta iniciativa, aunque tampoco quiso descartarla de plano.
“Está claro que el presupuesto del año que viene, el que se aprobó, está pensado sin pandemia”, recordó Arroyo. Pero de inmediato, reconoció: “Si la situación se complica en materia sanitaria, si hay rebrotes, se van a volver a aplicar medidas de emergencia”.
En tanto, descartó que la eliminación del IFE haya significado una merma en el aporte que el Estado realiza en materia social.
“Nosotros, con todas las medidas que aplicamos en diciembre, tenemos una ejecución de $63.000 millones. Si yo lo quiero ver desde el presupuesto del Ministerio de Desarrollo Social, arrancamos con un presupuesto de $84.000 millones y terminamos con uno de $240.000. Ejecutamos el 300% de lo planificado”, argumentó.