Por ahora, el plan piloto sólo funciona en la maternidad Sardá de Parque Patricios, pero la idea oficial es extender esta modalidad a todos los hospitales públicos porteños y a algunas clínicas privadas. Además, se creará una bitácora digital de cada chico con el fin de seguir en contacto con sus padres, a quienes se les enviarán desde recordatorios de fechas de vacunación hasta consejos sobre cómo cuidar al bebé.
El programa se llama Buenos Aires Amor Nacimientos. Fue lanzado por el Ministerio de Gobierno porteño a través del Registro Civil, y con la colaboración del Ministerio de Salud de la Ciudad y de la Maternidad Sardá. Su objetivo es simplificar los trámites que tienen que realizar los papás y acompañarlos durante el crecimiento del bebé.
Huellas dactilares. Un equipo móvil del Registro Civil simplifica los trámites a los padres. Se van con el trámite iniciado y en tres días reciben los dcumentos en la casa.
La primera en obtener su DNI por este sistema fue Ariana Abril Mora, cuando apenas tenía unas horas de vida. Dos empleadas del Registro Civil las visitaron a ella y a su mamá en su habitación de la Sardá. Llevaron una oficina móvil, con la tecnología necesaria para tramitar la partida de nacimiento y el documento. Con una especie de escaner le tomaron las huellas de los deditos de las manos a Ariana. Además, le sacaron una fotografía. «El personal del Registro Civil hizo una capacitación técnica para el manejo de los recién nacidos», contó el director médico de la Sardá, Eduardo Valenti.
«Lo primero que se hace es la inscripción o partida del nacimiento del bebé y con esa partida se realiza el trámite del DNI -explicó Gustavo Gesualdo, el subsecretario de Gobierno del Ministerio de Gobierno de la Ciudad-. Vamos hasta la habitación, porque la idea es que el bebé no se tenga que despegar de su mamá. El único requisito es que los padres presenten sus propios DNI y que hayan acordado el nombre y el apellido del bebé. De esa manera el trámite queda iniciado y después les llega el documento a su domicilio».
El funcionario anticipó que durante todo el año sumarán este sistema a diferentes hospitales públicos, hasta que funcione en los doce donde ya existen delegaciones del Registro Civil, como por ejemplo el Penna y el Fernández. «Empezamos en la Sardá porque es la maternidad emblema de la Ciudad y porque es donde se produce la mayor cantidad de nacimientos. Paralelamente, también planeamos implementar esta novedad en algunas instituciones privadas», sostuvo Gesualdo.
Los padres con chicos internados sin DNI a los que, por motivos médicos, no se les puedan tomar las huellas o una fotografía, también podrán acceder al servicio. En este caso, les otorgarán un «DNI cero provisorio», sin foto, ni huellas digitales, pero que garantizará su derecho a la identidad hasta que los padres puedan gestionar el definitivo.
En todos los casos, se creará una plataforma online donde se llevará una suerte de bitácora digital del niño, para seguir en contacto con los padres en la etapa posterior al parto y de crecimiento. El Gobierno porteño usará esa plataforma para enviarle a los padres la documentación actualizada del recién nacido en formato PDF, recordatorios de las fechas de vacunación, consejos sobre el cuidado del bebé y recomendaciones de instituciones educativas, entre otras informaciones.