El ministro de Trabajo, Claudio Moroni, admitió que en la Casa Rosada ya analizan las “herramientas” para sustituir ese programa y el ATP que reciben las empresas.
Más allá de que distintas voces afirman que el Gobierno tiene definido avanzar con el pago de una cuarta entrega del Ingreso Familiar de Emergencia, desde la Casa Rosada también empezaron a dar señales para mostrar que ya se trabaja en el escenario “pos-IFE”.
Específicamente, en armar un esquema que reemplace a ese bono de emergencia de $10.000 y al programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción que auxilió a algunas empresas.
Así lo adelantó este sábado el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, quien inclusive aseguró qué el objetivo “es sostener a determinados sectores”.
En qué plan se piensa
“Estamos viendo todas las herramientas posibles para generar una ayuda que reemplace al IFE y el ATP para quienes dejen de percibirlo. Los créditos a tasa subsidiada son una posibilidad”, afirmó Moroni en una entrevista con CNN Radio.
“Con el ATP y el IFE instrumentamos el programa de cobertura más grande de la historia argentina. Utilizamos las herramientas para paliar daños. Ahora estamos discutiendo la modalidad. Nuestro objetivo es sostener a determinados sectores. Los mecanismos de sustitución de ingresos tienen que ser transparentes y focalizados”, agregó.
Las palabras del ministro van en la misma línea de lo ya expresado por otros funcionarios, como el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, quien en la semana reconoció que el Ejecutivo busca “focalizar” la ayuda, y apuntó específicamente a la franja de jóvenes de entre 18 y 24 años.
“Más que preocupados, estamos ocupados por la situación económica. El Gobierno lo que hizo es minimizar los daños y estamos en plena discusión de herramientas para seguir ayudando en este contexto”, insistió Moroni.
Qué pasará con el IFE 4
Mientras tanto, los casi 9 millones de beneficiarios que ya recibieron los tres pagos del bono de $10.000 se encuentran expectantes ante la posibilidad de que el Gobierno anuncie en los próximos días el desembolso del cuarto y último IFE.
En ese sentido, versiones recientes afirman que se haría efectivo entre los meses de noviembre y diciembre y que el objetivo sería exhibir un esfuerzo más por parte del Estado para poder pasar el fin de año.
Precisamente, esa idea fue expresada por el presidente Alberto Fernández en una entrevista publicada el domingo pasado. Allí, al referirse al aumento del déficit, el mandatario reconoció que «es muy posible que el gasto crezca porque todavía seguimos pagando ATP, asignaciones y estamos viendo si no hace falta un IFE 4 para terminar el año tranquilos”.
A quiénes llegará
El esquema para abonar este IFE final sería exactamente el mismo que se aplicó anteriormente y, de ese modo, alcanzar nuevamente a 9 millones de personas.
La decisión de no modificar el universo de beneficiarios está relacionada con las dificultades que representa filtrar los datos para lograr que la ayuda llegue a quienes realmente lo necesitan y por la falta de tiempo para llevar adelante ese proceso.