En uno de los Diarios Digitales que se publican en Saladillo, se puede leer la noticia de gestiones que realizan los Municipios de Olavarría y Tapalqué, destinadas a reactivar el funcionamiento del ramal ferroviario (explotada por la empresa Ferrosur Roca) que une ambas ciudades en un recorrido de 67 km, con estaciones intermedias (Altona, Crotto).
Por otro lado, leemos también en los Diarios Digitales Locales, que se están realizando estudios para establecer medios de Transporte Públicos para las distintas localidades del Partido; en muy buena hora la idea de escuchar propuestas.
Ahora bien, sabemos lo que significan para las localidades el Ferrocarril, su existencia o su ausencia determinan la vida de ellas; lo cual podemos comprobar quienes tenemos un poquito más de edad y que podemos relatarles a los más jóvenes, como hemos visto la desaparición de pueblos enteros. Por ejemplo Blaquier, que tenía su Estación (Ferrocarril Provincial), Comisaria con un efectivo, Escuela, Almacén de Ramos Generales, Carnicería, Mercería, Estafeta Postal, y obviamente el Bar con Cancha de Bochas y Futbol, sede del equipo que representaba a la localidad. Paraje transformado actualmente en un páramo.
Conocemos también, que no solo la cancelación de los servicios ferroviarios fueron los responsables de la migración de otras localidades del interior como Toledo o Polvaredas
hacia la Ciudad Cabecera, pero es innegable la incidencia de levantar el ramal que pasaba por allí. Anecdóticamente, para recordar y difundir, no solo levantaron el funcionamiento, sino que además extrajeron y comerciaron durmientes y rieles.
También debe señalarse que hasta el 2018 existió un servicio de Coche Motor que llegaba hasta General Alvear.
En este contexto, y como soñar no cuesta nada, deberíamos preguntarnos si ¿no sería posible, en tanto y en cuanto las condiciones de la estructura de vías lo permitieran, gestionar un servicio Férreo Local que uniera Saladillo, Cazón, Del Carril, la Barrancosa y algunas paradas intermedias?
Sería fantástico, y posible técnicamente, porque de no existir Coches Motores disponibles podrían construirse en nuestra ciudad; gente preparada y creativa para esto tenemos.
Imaginemos, y no puedo separarme de mi profesión docente, los alumnos que diariamente se movilizan a la Escuela de Educación Agraria de Cazón, o la Escuela Primaria N°9, la Escuela Primaria N°7, o bien el CPT de la Barrancosa, tendrían un medio más económico y más seguro.
Por otro lado estos servicios educativos podrían incrementar sus matrículas, permitiendo que más niños y jóvenes accedieran a ellos, ya que en la actualidad existen algunas dificultades porque muchos no pueden acceder a las escuelas puesto que deben abonar un vehículo particular para poder concurrir a esos establecimientos.
Pero no sería solamente una ventaja para el Sistema Educativo, pensemos seriamente en los beneficios a las localidades, que podrían usufrutuar los servicios de Salud que brinda la Ciudad (públicos y privados), los servicios administrativos de la Provincia y de la Municipales, el contacto con más y mayor posibilidad de adquisición de bienes, y otras muchas facilidades que permite el acceso en forma económica, a servicios ausentes en esas localidades.
Dice una frase de Lao-Tse “Un viaje de mil Kilómetros comienza con un primer paso”.
(https://www.youtube.com/watch?v=3xVC4ptjehs)
Luis Dario Nagore