Hace 94  años un Golpe  Cívico- Militar  derrocó a  Hipólito Yrigoyen

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A 94 AÑOS DEL DERROCAMIENTO DE HIPÓLITO YRIGOYEN

“El 6 de Septiembre de 1930 debe ser inscripta en la antología de las fechas nefastas para el país. Fue el primer traspié de la Argentina Democrática, fue el preludio de la ley de la selva que caracterizó  gran parte de la historia argentina reciente. Hace 94  años un Golpe  Cívico- Militar  derrocó a  Hipólito Yrigoyen   sus gobiernos fueron la expresión de la Democracia y la Justicia  Social en Argentina.” Carlos Antonio Gorosito

“El 5 de septiembre  de 1930 un grupo fascista  liderado por el General José  Félix Uriburu, cabeza del movimiento Cívico-Militar derrocó que al Presidente  Hipólito Yrigoyen que llevaba 2 años de su segundo periodo de Gobierno había asumido el 12 de octubre de  1928, reemplazando a otro  radical el Dr. Marcelo T. de Alvear (1922-1928).  Yrigoyen además de ser unos de los padres fundadores de la UCR, fue el primer  presidente Argentino elegido por el voto  popular (sufragio universal masculino, secreto y obligatorio) en 1916.  Yrigoyen dijo que su programa era la  Constitución  y que no venía a vengar sino “a reparar” los males que le habían causado al país los grupos privilegiados y así lo hizo. En los libros de historia se puede indagar sobre su grandiosa obra de gobierno. Fue un Presidente   popular y al servicio de los intereses populares y no un populista como  lo habían calificado en el pasado y lo han reiterado en el presente algún  anti yrigoyenista  y anti radical, que ha usado a nuestro partido y pretende vestirse con ropaje republicano.  Yrigoyen en las elecciones de 1928 para reemplazar a su correligionario Dr. Marcelo de Alvear  ganó por un “aluvión de votos”.   Los sectores de  privilegio vieron que no le podían ganar en las urnas entonces como diría  más adelante el Dr. Raúl Alfonsín a falta de  “votos recurrieron a las botas” para desalojarlo del gobierno.  El propio  Yrigoyen llamó a los que lo derrocaron “Palanganas”  de   “boca grande y poco contenido”. Empezaron  hablar de la “vejez de Yrigoyen”, inventaron “El Diario  de Yrigoyen”, se referirán despectivamente al Presidente como “El Cesar  Octogenario”, se   cuestionaba a la Democracia, Natalio Botana desde el diario “Crítica” alentaba una campaña que en términos actuales podríamos llamar “destituyente”.  Desde la intelectualidad Leopoldo Lugones alentaba la intervención de las   Fuerzas Armadas para interrumpir el orden institucional. Ya  venía  anunciando  “La Hora de la Espada” en un discurso que pronunció como motivo del Centenario de la Batalla de Ayacucho en 1924. Lugones  dijo en esa oportunidad: «Ha sonado otra vez, para bien del mundo, la hora de la espada… Pacifismo, colectivismo, democracia, son sinónimos de la misma vacante que el destino ofrece al jefe predestinado, es decir, al hombre que manda por su derecho de mejor, con o sin ley, porque ésta, como expresión de potencia, confúndese con su voluntad.» Definió el pacifismo como «culto del miedo, o una añagaza de la conquista roja.» Resumió la vida en cuatro verbos de acción (mussoliniana): «amar, combatir, mandar, enseñar.» Declaró «caduco» el sistema constitucional y postuló: «El ejército es la última aristocracia, vale decir la última posibilidad de organización jerárquica que nos resta ante la disolución demagógica.»   Fueron creando el clima para la interrupción del orden institucional. Y  un día como hoy  de hace 94 años llega la primera interrupción del orden institucional del país luego de la Sanción  Constitución de    1853 y de la Ley del Voto Secreto, Universal Masculino que permitió elecciones con ese sistema en 1916.   El derrocamiento de Yrigoyen fue el primer traspié de la Argentina Democrática fue el preludio de la ley de la selva que caracterizó  gran parte de la historia argentina reciente.  Desde entonces vivimos más de medio siglo de inestabilidad institucional  hasta que el 30 de octubre de 1983 recuperamos para siempre la Democracia argentina gracias a la  lucha del pueblo  de nuestra  Patria que se vio sintetizada en la figura extraordinaria del Raúl  Alfonsín.  Hay  fechas  significativas en la vida de nuestra Patria como el 25 de Mayo, el 9 de julio, el 30 de octubre y el 10 de diciembre por el significado que ellas entrañan: el primer Grito de Libertad, la Declaración de nuestra Independencia,  la Recuperación de la Democracia y la asunción del primer  gobierno  Democrático luego de larga noche de la dictadura.  Pero el 6 de Septiembre de 1930 debe ser inscripta en la antología de las fechas nefastas para el país.  De no haber  ocurrido es fecha en el 2016 hubiésemos festejado los 100 años de Democracia ininterrumpida y en el 2026 estaríamos arribando a su 110  Aniversario.  Reitero no voy hablar de la  gran obra de gobierno del gran demócrata y republicano como lo fue  Yrigoyen.    Sabemos que las sociedades  no son perfectas que la integramos seres humanos que por definición somos imperfectos y así como tenemos nuestras virtudes también  tenemos nuestras miserias humanas. Son todas las sociedades  y pueblos del mundo producto de quienes las habitamos.   Gobiernos deben tener todos los países del mundo, es ello una verdad de Perogrullo. Que yo sepa hasta hoy no se ha inventado un sistema mejor que la Democracia, donde le pueblo decide  con su voto.  No todos los países del mundo tienen Democracia.  Gobiernos autoritarios violan los derechos humanos, no hay libertad de expresión, no hay lugar para la  diversidad d pensamiento y  minorías gobiernan en nombre de todos.  Nosotros los argentinos recuperamos en 1983 la posibilidad de elegir y ser elegidos.  Recuperamos la  posibilidad de decidir sobre los destinos del país. Tenemos el derecho y la obligación de votar  periódicamente.  Por cierto que nos podemos equivocar.  Por cierto que  en una sociedad no  hay  uniformidad. Por cierto que todos no pensamos igual y tenemos distintas visiones de cómo se soluciona los problemas del país. Pero el árbol no nos debe impedir ver el bosque. La Vida y la Democracia son los valores supremos a defender.  Los argentinos arrastramos muchos años y problemas y frustraciones. El 6 de septiembre debe ser solo el recuerdo de una fecha nefasta para el país.  Tenemos que buscar siempre las soluciones de nuestros problemas en el marco del sistema Democrático. Los momentos que estamos viviendo los  argentinos en estos momentos no son nada fáciles. Yrigoyen el  Padre del voto Secreto en la  Argentina nos enseñó sobre el valor de la  Democracia  y la obligación ineludible que tenemos de luchar por la justicia social. Sus gobiernos fueron un apostolado  cívico nosotros debemos reivindicar  permanentemente su legado”.

Carlos Antonio  Gorosito-Ex Intendente Municipal (1991-2015)-  Ex  Presidente de la UCR de la Pcia.de Bs. As  (2005-2007), Saladillo 6 de septiembre de 2024.

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