Estaba todo dado para una fiesta. El triunfo ante Canadá abrió la ventana, pero apareció el Che y la cerró.
Argentina ganaba por 17 puntos, se confió y se desinfló en el último acto. Perdió con Republica Dominicana 79/75 y se quedó sin Mundial por primera vez desde 1982.
El Ché García volvió a tocar la gloria con sus manos, dicen que “la venganza es un plato que come frio…”, recordemos que el Che García dirigió a la argentina hasta hace algunos meses y fue despedido con un pie en el avión.
De todas maneras Argentina podía clasificarse al Mundial y detrás iba a quedar tapado lo que sucede con el básquet en el país, desde el mal manejo de la Confederación, pasando por algunas Federaciones sobre todo la de Provincia y hasta en clubes donde lo más importante del año basquetbolisticamente es un torneo comercial. Hace años se viene haciendo todo lo posible para que el desenlace sea precisamente este. No puede resultar sorpresivo. Esto duele, pero tenía que pasar. Nefasta la dirigencia, es el golpe en la mesa para dar vuelta todo. Meter gente preparada en todo sentido, desde dirigentes, subcomisiones, staff, etc.
El combinado argentino concluyó con un registro 8-4 y finalizó cuarto en la zona E, detrás de Canadá (11-1), República Dominicana (9-3) y Venezuela (8-4).
La increíble derrota argentina tuvo una sola figura en el rectángulo de juego. El alero santiagueño Gabriel Deck, quien viajó especialmente desde España para unirse al equipo del DT Pablo Prigioni. El actual valor del Real Madrid terminó con una planilla de 27 tantos (10-13 en dobles, 0-2 en triples, 7-8 en libres), 3 rebotes, 2 recuperos, 2 asistencias y una tapa.
Facundo Campazzo, el más ovacionado por el público marplatense, tuvo una noche con altibajos, tal como lo exhiben registros de 10 puntos, 5 asistencias, 4 rebotes, 4 recuperos y un bloqueo, pero 4 pérdidas de balón.
En el equipo visitante se destacó el alero Jean Montero, responsable de 22 unidades (18 en el segundo tiempo).
El partido
Empezó con el equipo visitante prevaleciendo en el juego, a partir de la conducción prolija del tándem Feliz-Liz. Sin embargo, el equipo dominicano no pudo escaparse más allá del 8 – 3 inicial y, de a poco, Argentina fue ajustando piezas, con la energía de Campazzo (aportó en los distintos rubros) y la capacidad anotadora de Deck (8 tantos en el primer cuarto).
Cuando el equipo del cordobés Prigioni pudo correr la cancha, el seleccionado albiceleste logró escaparse y quebró la primera línea del rival.
Pero algunas pérdidas inoportunas complicaron y los dirigidos por el bahiense García continuaron en partido, más allá de que abusaron del tiro exterior desde distintas posiciones (3-11 en triples).
La diferencia osciló entre los 7 y 10 tantos en favor del quinteto local y se estacionó en 7 (42-35) al cierre del primer período.
Las corridas de Jean Montero (9) le permitieron a República Dominicana meterse otra vez en partido y quedar abajo 54-64, de cara a los últimos 10 minutos de partido.
En el capítulo de cierre, Argentina equivocó todos los caminos: no tuvo fluidez, forzó tiros desde posiciones complejas y el aro se cerró.
Entonces, República Dominicana, con la contribución de Montero más algunas apariciones de Víctor Liz (ex Obras Basket) recortó diferencias y, a falta de 2m., se puso 71-71.
En el tramo final, los nervios le jugaron una mala pasada al equipo albiceleste, que falló conversiones potables en el perímetro y tampoco pudo aprovechar dos libres de Nicolás Laprovíttola.
Síntesis
Argentina (75): Facundo Campazzo 10, Nicolás Laprovíttola 10, Nicolás Brussino 7, Gabriel Deck 27, Marcos Delía 10 (fi) Leandro Bolmaro 3, Carlos Delfino 2, Tayavek Gallizzi 3, Patricio Garino 3, Máximo Fjellerup 0, Juan Pablo Vaulet 0. DT: Pablo Prigioni.
República Dominicana (79): Andrés Feliz 11, Víctor Liz 8, Rigoberto Mendoza 5, Angel Delgado 7, Eloy Vargas 6 (fi) Antonio Peña 3, Gelvis Solano 2, Jean Montero 22, Angel Suero 13, Jhonatan Araujo 0, Juan Guerrero 0, Juan Suero 2. DT: Néstor García.